Se busca priorizar ciertas zonas, mejorar la “onda verde” y detectar rápidamente las averías de semáforos.
Son frecuentes las demoras en el nudo vial
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El Gobierno de Mendoza busca agilizar el tránsito en la zona Metropolitana de la provincia y por eso Tránsito complicado por semáforos en el límite de Capital y Las Heras . La estrategia tiene dos patas fuertes: coordinar los semáforos para que haya más zonas con onda verde y darle prioridad al transporte público.
En tanto, se buscará una gestión “inteligente” del tráfico y poder resolver más rápidamente averías en los semáforos.
Tal cual anunció hoy la Subsecretaría de Infraestructura y Desarrollo Territorial de Mendoza, el Centro de Gestión de la Movilidad coordinará los equipos semafóricos para facilitar la generación de ondas verdes en el Área Metropolitana. La intención es tener en cuenta las variaciones del tránsito en los diferentes horarios, por eso hablan de “programaciones dinámicas” según la hora del día. Además, desde el gobierno aseguraron que habrá detección automática de fallas en los semáforos.
La onda verde es algo muy apreciado por los conductores y que, sin dudas, agiliza mucho la circulación. Se ha establecido en diversas arterias pero con el tiempo se pierde porque se descoordinan los semáforos.
El proyecto de Gestión Inteligente del Tráfico fue presentado hoy y participó del acto el Gobernador Alfredo Cornejo.
Según se ha detallado, la iniciativa permitirá el monitoreo remoto y en tiempo real de los semáforos desde el Centro de Gestión de la Movilidad. “Con este avance, la Subsecretaría de Transporte busca modernizar el sistema semafórico, apostando por una movilidad más eficiente y segura en la provincia”, resaltó el área.
Este sistema posibilitará la coordinación de intersecciones semaforizadas, optimizando la circulación vehicular mediante la generación de ondas verdes, lo que mejorará la fluidez del tránsito. Además, permitirá programaciones dinámicas según la hora del día y la demanda del tráfico, así como la detección automática de fallas en los semáforos, tales como lámparas quemadas, aperturas de gabinetes, cortes de energía o daños por accidentes. Estas alertas serán enviadas de inmediato al área técnica para su pronta solución.
“Esto permite el flujo óptimo de vehículos, tanto en el sentido de la Costanera como en las intersecciones transversales”, explicó el subsecretario de Transporte, Luis Borrego. El funcionario destacó la importancia de la sincronización semafórica para generar ondas verdes, facilitando la fluidez del tránsito y priorizando el transporte público, en beneficio de miles de pasajeros diarios.
El sistema también cuenta con la capacidad de sincronización específica ante emergencias. “Se puede otorgar un tiempo de paso verde más prolongado en la Costanera para permitir el paso de un vehículo de emergencia”, detalló el subsecretario.
Además se explicó cuáles fueron los criterios de selección y planificación. Borrego detalló que se priorizaron sectores en relación a la importancia del transporte público y la jerarquización de las avenidas. “Más de 300.000 personas viajan en transporte público cada día en el Gran Mendoza, lo que representa más de 800.000 transacciones diarias. Por eso, priorizamos las vías con mayor circulación, como la Costanera ”, señaló.
Actualmente, el equipo de la Subsecretaría de Transporte trabaja en la licitación y en los pliegos técnicos para la segunda etapa. Según el subsecretario, “en los próximos meses podremos iniciar esa obra”.
Tal cual publicó Los Andes, serán serán 18 intersecciones. El espacio comprendido para las obras y la modernización de los semáforos se dará a lo largo de la Costanera, desde la intersección al norte con calle Bajada de Arrollabes - Lavalle (departamentos de Capital y Guaymallén, respectivamente); hasta la intersección con Brasil - Berutti (departamentos de Godoy Cruz y Guaymallén).
El sistema se implementará en dos etapas. Borrego recordó que la licitación de la primera fase se llevó a cabo en noviembre de 2024, con una inversión de aproximadamente 180 millones de pesos. Adelantó la continuidad del proyecto con dos nuevas etapas:
Etapa II: Incorporación de 200 intersecciones en el microcentro de Ciudad y Godoy Cruz.
Etapa III: Expansión a los restantes departamentos del Gran Mendoza.
Para su implementación, fue necesario modernizar los semáforos, incorporando nuevos equipos electrónicos y una red privada de telecomunicaciones encriptada. Esto permite monitorear y detectar fallas de manera inmediata, reduciendo los tiempos de respuesta ante desperfectos. “Ahora, desde el centro de monitoreo, podemos detectar si un semáforo tiene una falla eléctrica, está intermitente o ha sufrido una rotura de cables, lo que nos permite enviar rápidamente un equipo técnico”, afirmó Borrego.