Un matrimonio británico robó el semen de su hijo muerto para convertirse en abuelos. Los destalles del caso han conmocionado a la prensa del Reino Unido y han enfrentado a varios profesionales.
Todo empezó con un accidente de tránsito en el que un joven de 26 años perdió la vida. Sus padres, no pudieron aceptar el hecho de perder a su único heredero y tomaron una dramática decisión.
Según informó el diario español ABC, una vez que recuperaron el cuerpo, el matrimonio contrató a un profesional para extrajera el esperma de hijo. Después, lo enviaron a una clínica estadounidense, subrogaron un vientre, escogieron el generó y concibieron a su nieto.
El encargado de llevar a cabo el procedimiento fue el médico David Smotrich. "Producir un niño usando esperma póstumo es extremadamente raro. Lo he hecho solo cinco veces. Esta pareja estaba desesperada por encontrar a alguien que pudiera crear un heredero", explicó el médico al Daily Mail.
"Ellos querían un varón. Lo que hicimos no está disponible en el Reino Unido, donde la selección de género no es legal", agregó.
Se crearon cuatro embriones para que el matrimonio pudiera elegir uno y se estima que todas las intervenciones costaron entre 78.000 y 130.000 dólares. Finalmente, los abuelos volvieron a Reino Unido con su nieto en brazos.