Otro hecho violento en el fútbol amateur: le pegó un cabezazo a un rival y lo dejó inconsciente

Ocurrió en Corrientes. Producto del golpe, el jugador agredido “no puede masticar ni ir a trabajar”, según detalló su esposa. Además, la mujer aseguró que buscan judicializar el caso.

Javier tiene que comer todo líquido, sopa y yogurt.
Javier tiene que comer todo líquido, sopa y yogurt.

Lamentablemente, una nueva escena de violencia mancha al fútbol amateur. Esta vez, el episodio ocurrió durante un partido de futsal en la ciudad de Mercedes, en Corrientes, donde un jugador le pegó un cabezazo a un rival, que quedó inconsciente y recibió ocho puntos de sutura en la boca y debajo del ojo.

El hecho se dio el pasado martes durante un partido en el que se enfrentaron San Martín y Cherubicha B, en el gimnasio de la Escuela Normal, correspondiente a la segunda fecha del torneo de la Asociación Civil Mercedeña de Fútbol de Salón (AMeFuSa).

La discusión comenzó luego de que Javier, de Cherubicha B, despejara con fuerza la pelota al lateral. Acto seguido, un rival se molestó, comenzó a empujarlo y le dio un manotazo. Javier reaccionó con otro empujón y fue entonces que otro futbolista se metió y le propinó un cabezazo en el medio del rostro, que lo hizo caer desmayado.

En diálogo con El Trece, Carolina, la esposa de Javier, relató: “El chico que le empieza a dar codazos parece ser que es el hijo del tipo que agredió a mi marido. Está hecha la denuncia y la persona no puede volver a jugar al fútbol. El agresor se llama Blancos Pedro y no sabemos a qué se dedica”.

El jugador "no puede masticar ni ir a trabajar". Foto: Twitter / @noticiero9ok
El jugador "no puede masticar ni ir a trabajar". Foto: Twitter / @noticiero9ok

Y agregó: “Javier es albañil y siempre juega con el mismo equipo. Yo todas las veces que él juega, lo acompaño. Se vivió un momento difícil porque al verlo no sabes qué es lo que tiene o lo que pasa. Es la primera vez que juegan contra ese equipo. Ellos ascendieron y nunca se habían cruzado.

Al respecto, la mujer agregó: “Vamos a poner abogados porque él es albañil y es complicado porque dependemos de él. Estamos con los abogados para ver qué solución hay”. Además, contó que, a raíz de la lesión que sufrió, su marido “come todo líquido, sopa y yogurt”, mientras que “no puede masticar ni ir a trabajar”.

El rostro de Javier tras sufrir la agresión. Foto: Gentileza
El rostro de Javier tras sufrir la agresión. Foto: Gentileza

“El trabajaba de lunes a viernes. Empezaba a las 6, ingresaba a las 14 hasta las 17. Y también trabaja los sábados”, puntualizó preocupada Carolina.

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