"Hagan lo que quieran" les dijeron los ejecutivos de EMI a Tom Yorke (guitarra, voz y piano), Jonny Greenwood (guitarra y teclados), Ed O'Brien (guitarra y coros), Colin Greenwood (bajo, sintetizador y percusión) y Phil Selway (batería) después del éxito en ventas del anterior disco. Y los músicos de Radiohead hicieron "Ok computer" que, para muchos críticos, es el último gran disco de rock. Una obra visionaria cuya influencia fue decisiva para el rock alternativo.
"Ok computer" salió primero en Japón, donde fue lanzado en mayo de 1997, y luego en el resto del mundo, donde se vendió en junio del mismo año. Es el tercer disco de Radiohead que da un giro a su estilo con un toque futurista, dejando atrás el brit pop guitarrero de sus trabajos anteriores. Para grabarlo, la discográfica le asignó a la banda 100 mil libras y los dejó totalmente a cargo de la producción. "Ok computer" tiene un sonido experimental que lo emparenta con Pink Floyd pero también con las búsquedas más retorcidas del jazzero Miles Davis.
El nombre del disco salió de una frase de una novela clásica de ciencia ficción cómica de fines de los '70: "The hitchhiker's guide to the galaxy". Zaphod Beeblebrox, el presidente galáctico le dice a una nave espacial computarizada: "ok computadora, ahora quiero un control manual completo". La orden significaba que los humanos sólo se salvarían si recuperaban el control que habían cedido a las máquinas, ¿Les suena?.
El concepto general de "Ok computer" trata sobre un futuro angustiante controlado por las máquinas y refleja la alienación posmoderna. Y la tapa traduce ese paisaje con una estética de collage creada por Stanley Donwood. Pero también y a su modo es un grito esperanzador. Una mezcla de guitarras y baterías con samplers y electrónica que reinventó el rock progresivo. Pero, pese a esa complejidad, es un disco con doce canciones extrañas, densas, que ejercen una seducción inexplicable por sus melodías muy accesibles. Tanto, que un año después de su lanzamiento, ya era doble disco de Platino por las ventas.
Para grabar "Ok computer", Radiohead alquiló St. Catherine's Court, un castillo ubicado en Bath, 180 km al oeste de Londres, construido en el 1500 y que perteneció a la familia del rey Enrique VIII. En los '90 esa mansión era de la actriz Jane Seymour, famosa por interpretar a una de las chicas Bond (en la película "Live and let die") y por la serie televisiva "La doctora Quinn". Un detalle insólito es que Tom Yorke grabó las voces de las canciones en sitios inusuales: debajo de una escalera y en un baño. La acústica que tenían esos lugares lo impactó.
"Ok computer" es lo más alto a lo que llegó el rock alternativo. Uno de esos discos que marcan un hito, un punto de inflexión. Quizás sea el último gesto de audacia extrema de una banda de rock que capturó el signo de su tiempo.