El Gobierno hizo una evaluación del nuevo sistema digital para solicitud y seguimiento de licencias médicas para los docentes. En este marco, se informó que 21% de las licencias prolongadas corresponden a diferentes diagnósticos de salud mental, aunque para la Obra Social de los Empleados Públicos (OSEP), que tiene a cargo el sistema, esta no es una proporción significativa.
Así lo consideró el titular de la entidad, Sergio Vergara, quien junto a Jaime Correas (titular de la Dirección General de Escuelas) realizó un balance de los dos meses que lleva funcionando este nuevo procedimiento.
Las principales patologías en licencias breves que motivaron las solicitudes estos meses fueron faringitis, gastroenteritis inespecífica y bronquitis, en lo cual incide la época del año. En tanto, Vergara señaló que en las licencias prolongadas tienen más impacto las dolencias traumatológicas que las de salud mental. A este respecto, en realidad los números dicen que en setiembre de este año, las juntas trataron un 21% de casos de salud mental y un 17,6% de traumatología. En octubre, en cambio, el 21,2% fueron de salud mental y el 29,5%, de traumatología.
Entre las dolencias que más han afectado el bienestar de los docentes se cuentan lumbalgias, traumatismos, esguinces, fracturas y cervicalgia.
En este contexto explicó que traumatología y salud mental son las patologías que requieren licencias más largas, muchas de más de tres meses. De todas formas explicó que de acuerdo a lo implementado tienen que realizarse controles cada 30 días.
El nuevo sistema fue lanzado el 15 de agosto de este año y propuso un procedimiento totalmente digital para eficientizar la línea 0800 que generaba quejas por las dilaciones y falta de efectividad.
Por aquel entonces la promesa del gobierno, que fue anunciada por el mismísimo gobernador Alfredo Cornejo, era darle mayor efectividad al trámite y garantizar una buena atención de la salud de los docentes.
Más de 3.000 licencias diarias
"Ustedes piensen que diariamente 5% de nuestros docentes pide licencia médica, es decir que es mucha gente", dijo Correas. Si se tienen en cuenta que la provincia tiene unos 65 mil empleados en este sector (entre docentes, celadores y administrativos) se trata de 3.250 licencias médicas por día.
Actualmente, puede iniciarse el pedido con sólo enviar una foto del certificado a través de la página web o de una aplicación pero también del modo tradicional. De todas formas, 70% de los trámites se han hecho por la vía digital desde que se lanzó, tal cual informó Correas.
Consideraron que el mayor logro es haber ampliado la atención de las juntas médicas a las que han sumado más especialistas para patologías específicas. Además, subrayaron que han llegado a los departamentos para facilitar el acceso. Actualmente hay seis.
Correas señaló que se realizan cuando se trata de licencias de más de 10 días y permiten que el docente regrese cuanto antes a su trabajo.
El nuevo sistema ha realizado 3.000 juntas médicas los últimos dos meses a cargo de médicos laborales y especialistas. Según dijo Vergara 25% de los evaluados ya ha regresado a su trabajo. "Cuando se trata de licencias largas se puede trabajar desde las juntas médicas no como un elemento de extorsión sino como un elemento de captación", dijo el titular de Osep.
"Licencias ya": esta era las promesa, en tanto el nuevo sistema permitiría tener información en tiempo real. Ni bien el docente sube la foto del certificado se activa el procedimiento que permite, además saber cuántos días se ausentará para iniciar la gestión de una suplencia. Los datos llegan a la DGE y a la institución donde trabaja.
Vergara destacó que el sistema permite tener un mejor control, lo que redunda en prevención y mejor cuidado de la salud del docente-paciente ya que se ve obligado a realizarse chequeos periódicos.
Por otra parte, los funcionarios negaron que haya docentes que vayan a trabajar enfermos por no perder el ítem aula y aseguró que los días de licencia se otorgan de acuerdo a un criterio médico. Hicieron hincapié en que quienes están en tratamiento oncológico, están embarazadas o tienen una situación de violencia de género no pierden el ítem aula.
Vergara informó además que el 6% no completa el trámite o este es rechazado, por lo que la falta no queda justificada, pero consideró que se trata de un número bajo.
Las principales quejas contra el sistema
Desde el Sute, el sindicato de los docentes, no se manifestaron muy conformes con el nuevo sistema, aunque el Gobierno minimizó esta opinión por considerar que no es representativa de la mayoría.
Alejandra Castelli, prosecretaria de Salud Laboral del sindicato comentó a Los Andes que uno de los problemas es que "cargan mal las licencias". Por otra parte dijo que a veces el médico tratante no va o no ingresa al domicilio y el docente tiene que luego justificar de manera tardía y personalmente la licencia. Otra situación que mencionó es que en zonas alejadas no hay buen servicio de internet para realizar el trámite. Ante esto último, la DGE dijo que está la opción de la línea telefónica.
Otro tema es el recorte de licencias: "Los profesionales (de salud laboral) dan de alta y exigen que el médico tratante dé el alta pero eso no se puede porque hay que respetar el diagnóstico que dio el médico", explicó.
Finalmente destacó: "El error más grave es que quieren demostrar que hay menos compañeros con licencia desde que ellos controlan (…) se trata de vulneraciones de derechos".