Ideó un sistema de estafa tan simple como detectable. A tal punto que no resistió la primera auditoria administrativa. Pese a esto, el supuesto timador logró quedarse con más de 1 millón de pesos pertenecientes al Estado Provincial.
Lo más llamativo es que detrás de la "fuga" de dinero detectada está un efectivo policial, quien ya fue denunciado por el Ministerio de Seguridad ante la Inspección General de Seguridad (IGS) y la fiscalía de Delitos Económicos.
El Policía involucrado realizaba tareas administrativas dentro del ministerio denunciante, tiene 24 años de antigüedad y se sospecha que comenzó con las maniobras fraudulentas desde hace al menos un año. Ahora, luego de su pase a pasiva y del inicio del sumario, cobrará la mitad del sueldo y, de comprobarse el delito por el cual es investigado, podría ser expulsado de la fuerza, a pocos años de jubilarse.
El modus operandi
Este efectivo era el encargado de ir hasta el banco Nación para retirar el dinero que depositaban los infractores viales foráneos que eran multados en Mendoza. Luego de esto, transfería la recaudación a una cuenta del ministerio de Seguridad. Sin embargo, en el medio de este traspaso, según se detectó en la auditoría, el policía se quedaba con una "porción" de la plata. En lo que va de 2018, el faltante asciende a $1.500.000.
Ya conociendo de su situación, el uniformado se presentó a trabajar esta mañana y admitió ser el responsable del rojo en las cuentas de las multas, confirmaron a Los Andes desde ese ministerio.
Básicamente, este hombre informaba en la oficina una recaudación por las multas de, por ejemplo, $50.000 cuando en realidad era de $70.000, los $20.000 de diferencia nunca llegaba a las arcas del Estado. Situación que fue fácilmente detectada por los contadores.
Escenarios posibles
"Fue denunciado después de un control periódico (le denuncia del ministerio ingresó el miércoles)", detalló Marcelo Puertas, titular de la Inspección General de Seguridad.
“Fue pasado a pasiva y se le inició un sumario, por lo que cobrará la mitad de su sueldo. La semana que viene va a ser citado a declarar, donde podrá presentar su descargo”, agregó Puertas.
El titular de la IGS explicó que la sanción para el policía puede llegar a la cesantía inclusive, es decir que no puede regresar a la fuerza, aunque luego de 5 años podría volver al Estado pero a otra dependencia. Aunque si es condenado por la Justicia Penal y la condena queda firme puede llegar a la exoneración.
En ese último caso, el denunciado “no podría ingresar más a la administración pública, esto en paralelo a la pena que pudiera decidir la justicia penal”, finalizó el titular de la Inspección General de Seguridad, Marcelo Puertas.