Quienes viajen a Chile con el propósito de hacer turismo de compras deberán considerar el tiempo disponible para visitar tiendas y centros comerciales.
Chile se convirtió en uno de los destinos más elegidos por los turistas argentinos debido a los bajos precios. Los centros comerciales y tiendas de Santiago, junto con otras ciudades chilenas, recibieron una gran cantidad de visitantes que aprovecharon la oportunidad de comprar productos a costos significativamente más accesibles que en Argentina.
Este auge del turismo de compras se vio impulsado por el impacto de la inflación en la economía argentina. Miles de argentinos cruzaron la cordillera en busca de productos electrónicos, indumentaria, artículos para el hogar y una gran variedad de bienes a precios considerablemente inferiores a los de su país.
Sin embargo, la implementación de la "Ley 40 horas" en Chile podría modificar este escenario para los turistas. El Gobierno chileno confirmó que en abril reducirá la jornada laboral, donde pasará de 45 a 40 horas semanales de manera progresiva. Ante este panorama, muchos se preguntan cómo este cambio afectará al turismo de compras.
El 26 de abril de 2024 entró en vigencia la Ley 21.561, conocida como la "Ley 40 horas", con el objetivo de disminuir paulatinamente la carga laboral en Chile. Su aplicación se realiza de manera escalonada: en la primera etapa, la jornada laboral se redujo de 45 a 44 horas semanales, donde establece que cualquier exceso sobre este límite debe compensarse con pagos por horas extras.
Además de la reducción horaria, la normativa incorpora otras modificaciones relevantes:
Para 2025 no se prevén nuevas modificaciones, pero el plan establece que en 2026 la jornada se reducirá a 42 horas semanales y en 2028 se alcanzará el objetivo de 40 horas semanales. El cronograma de implementación es el siguiente:
Chile espera que para 2028 todas las empresas y organizaciones cumplan con la reducción a 40 horas semanales.