Si hay una receta de torta que es imposible olvidar, es la de la famosa regla 1-2-3 de Paulina Cocina te garantiza un bizcochuelo esponjoso, casero y delicioso, sin necesidad de pesar ingredientes ni complicarte con técnicas raras.
Esta receta de torta es ideal para los que recién empiezan en la cocina o para los que quieren un bizcochuelo rápido y sin complicaciones.
Si hay una receta de torta que es imposible olvidar, es la de la famosa regla 1-2-3 de Paulina Cocina te garantiza un bizcochuelo esponjoso, casero y delicioso, sin necesidad de pesar ingredientes ni complicarte con técnicas raras.
Lo mejor es que todo se mide con un simple pote de yogur, así que no hay excusas para no probarla, ya que no necesitás de complejos utensilios de cocina ni ingredientes difíciles de conseguir.
Esta receta es ideal para los que recién empiezan en la cocina o para los que quieren un bizcochuelo rápido y sin complicaciones. Además, es súper versátil: podés sumarle esencia de vainilla, ralladura de limón o naranja, o incluso rellenarla con dulce de leche, crema o frutas.
Una torta básica que nunca falla y que siempre queda espectacular. Tomá nota, porque después de hacerla una vez, te la vas a acordar toda la vida.