Los descubrimientos arqueológicos nos permiten entender cómo vivieron nuestros antepasados, y este caso no es la excepción. Un equipo de investigadores halló evidencia de que, hace unos 7.000 años, los humanos utilizaron un tubo de lava en Arabia Saudita como refugio temporal.
Entre los restos encontrados hay herramientas de piedra, cerámica y huesos, lo que confirma su uso en la antigüedad.
El túnel subterráneo que protegió a los primeros humanos
El sitio en cuestión es Umm Jirsan, el tubo de lava más extenso documentado en Arabia Saudita, con aproximadamente 1,5 kilómetros de largo. Está ubicado en el campo volcánico de Harrat Khaybar, al norte de Medina. Según explicó el investigador Mathew Stewart, de la Universidad Griffith en Australia, dentro del túnel hallaron huesos humanos, restos de animales y fragmentos de cerámica.
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Descubrimiento en Arabia Saudita. Fuente de la imagen: Revista PLOS
¿Un refugio o un paso estratégico?
Si bien el hallazgo demuestra que los humanos ocuparon este tubo de lava, Stewart aclara que no era un refugio permanente. "Probablemente se usaba como parada en rutas de pastoreo, un sitio con acceso a sombra y agua para los pastores y sus animales", señaló en diálogo con Live Science.
¿Cómo se formó este tubo de lava?
Según el Servicio Geológico de los Estados Unidos (USGS), los tubos de lava se generan cuando un flujo de lava crea un conducto subterráneo que, al enfriarse, deja una cueva hueca. Estas formaciones pueden conservar estalactitas de lava en el techo y marcas del flujo en sus paredes. Para los humanos de la prehistoria, este tipo de refugios representaba una ventaja frente al calor extremo del desierto.
Un sitio con múltiples usos
Anthony Sinclair, profesor de la Universidad de Liverpool, cree que este tubo de lava también pudo haber sido una posición defensiva. "En aquella época había lobos, hienas, leones y leopardos en Arabia. Es posible que los pastores lo usaran para resguardar su ganado de depredadores", explicó.
Michael Petraglia, director del Centro Australiano de Investigación para la Evolución Humana, destacó que este hallazgo podría abrir nuevas puertas en la arqueología. "Esta cueva es solo el comienzo", afirmó en una entrevista con The New York Times.