En el sitio reina el silencio. Cada uno de los 13 inspectores está concentrado en sus dos monitores que pueden mostrar 12 de las 500 cámaras distribuidas en toda la Capital.
Uno de ellos observa cómo un sujeto limpia el vidrio de un auto del lado de la calle, otro registra un accidente, mientras que un tercero les cuenta el tiempo a dos autos estacionados en doble fila sobre la calle Mitre. Una mañana más en el centro de Visualización y Monitoreo de Capital, ubicado en Las Heras y Belgrano, que recientemente incorporó la elaboración de infracciones de tránsito.
Desde que comenzaron, a mediados de agosto, ya llevan labradas desde allí 371 multas, lo que equivale a un promedio de 10 por día. En su mayoría se trata de infracciones por haber estacionado en doble fila, dejando el vehículo abandonado, lo que produjo un inevitable congestionamiento vehicular. Son multas graves que tienen un valor de $2.775.
Si bien esta modalidad se popularizó como "fotomultas", Raúl Levrino, secretario de Seguridad Ciudadana de la comuna, explicó que no son tales, sino que se trata de una acción complementaria a las multas electrónicas en línea (on line), en las que un inspector está atestiguando la falta que se comete y es quien toma la decisión de sancionar. "En abril comenzamos a aplicar las multas electrónicas que llevan adelante nuestros inspectores en las calles con un celular y una impresora", comenzó a relatar el funcionario a la vez que precisó que de esas se aplicaron 6.314.
En ese sentido añadió que en agosto incorporaron la aplicación de sanciones desde el centro de monitoreo. "El objetivo es que se lleven a cabo acciones complementarias entre el personal que está en la vía pública y el de tránsito que está monitoreando", aseguró. Asimismo remarcó que el objetivo es evitar los congestionamientos, promover un tránsito seguro y disminuir los accidentes. "No tiene un fin recaudatorio porque las multas son más bajas", subrayó. La multa leve por estacionar en doble fila es de $980, pero si la persona se baja del vehículo pasa a ser grave y el valor de la multa asciende a $ 2.775.
Balance positivo
A poco más de un mes de la implementación de la nueva modalidad, el secretario de Seguridad Ciudadana aseguró que han comenzado a notar buenos resultados. "Hay algunos lugares en los que ha disminuido la doble fila como, por ejemplo, sobre 9 de Julio y Avenida España", precisó. Para él se trata de una zona neurálgica, en la que también se apoyan con preventores de forma permanente.
En una primera etapa la comuna apuntó a sancionar la doble fila, pero Levrino adelantó que evaluarán incorporar otro tipo de infracción. "Ahora, cuando hay un auto mal estacionado en una rampa de discapacitados o en algún otro lugar, el centro de monitoreo se comunican con un inspector para que se acerque al lugar y haga la multa", explicó. Asimismo informó que diariamente ingresan a la ciudad 270.000 vehículos, más el movimiento del parque interno de 110.000. Entre ellos las multas más frecuentes (un 80%) son por hacer doble fila y por mal estacionamiento.
Roberto Marino, quien trabaja como repartidor en la ciudad, reconoció haber notado las calles más descongestionadas. "Ante la amenaza de las multas evidentemente la gente reacciona, pero hay que seguir concientizando para que la situación no se relaje", manifestó. Aseguró que en su caso siempre anda acompañado para no dejar solo el auto.
En el mismo sentido se manifestó, Martha Díaz vecina de Godoy Cruz quien trabaja en Capital. "Confieso que desde que anunciaron que nos vigilan con las cámaras para poner multas me volví un poco más cuidadosa. Con lo que cuesta mover el auto por el combustible, sumar un desembolso extra por una infracción sería una locura", se sinceró.
Salida de escuelas
Párrafo aparte merecen las salidas de los colegios, momentos en los que la doble fila se vuelve inevitable. En este caso en particular Levrino aseguró que se tiene cierta consideración. "Hemos coordinado con colegios del centro para que en los horarios pico el ascenso y el descenso sea rápido, y no se multe", reconoció. Esto es así ya que se considera que en promedio en un colegio asisten 800 chicos, por lo que en un breve lapso llegan hasta allí por lo menos unos 300 autos. "Lo que buscamos evitar es que las personas se bajen del vehículo y lo que sí no permitimos es la triple fila que antes sí se veía", aclaró.
El "Gran Hermano" en Ciudad
Desde el centro de Visualización y Monitoreo de la Ciudad de Mendoza pueden observarse todas las calles de la ciudad.
Con 500 cámaras se cubren casi todos los rincones, y convierten al centro en algo parecido al Gran Hermano imaginado por el escritor George Orwell y replicado en el programa del mismo nombre.
En ese centro trabajan por turno 13 personas (entre preventores, inspectores de tránsito y personal de la Policía de Mendoza) que cubren las 24 horas. El propósito del centro es apuntar contra el delito y la contravención. Pero también se destinan inspectores de tránsito para el control vial y las multas a distancia.
La boleta llega al hogar
Una vez confeccionada la multa desde el Centro de Monitoreo es enviada al hogar del infractor, quien la recibe dentro de las próximas 48 horas. Una vez que le llega puede pagarla de forma inmediata con un 40% de descuento o presentar un descargo antes de los cinco días. Como prueba, el inspector hace una captura del momento de la falta, que luego puede ser requerida por la autoridad judicial o por el afectado.