Se trata de un terreno en Vallecitos que busca convertirse en el primer proyecto de turismo de cannabis y cáñamo en Mendoza. Está a 3.000 msnm y apunta a la educación, con plazas de alojamiento.
Fotos y videos: así será el inédito proyecto de turismo cannabico que sobresale en Mendoza y cuándo estrá listo. Foto: Gentileza Proyecto Vallecitos
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Mientras Mendoza aguarda por la aprobación de una ley que le permita crear su propio registro para usuarios y productores de cannabis medicinal y cáñamo-iniciativa impulsada por el Gobierno provincial-, son diversos los proyectos privados que se mantienen expectantes ante esta posibilidad. Y uno de ellos cuenta con una particularidad que lo convierte -o convertiría, hablando en potencial- en inédito y único por sus características.
Se trata de un proyecto que apunta a producir cáñamo -en una primera etapa- y luego cannabis para uso medicinal -en caso de aprobarse esta ley- a más de 3.000 msnm. "Proyecto Vallecitos" es el nombre de esta iniciativa, que apunta a convertirse en un sitio de referencia en lo que hace al "turismo cannábico", incluso con una pata en lo educativo.
“En el lugar se va a ofrecer la posibilidad de hacer senderismo, aprovechando que está el cerro Vallecitos cerca, sumar toda la experiencia de montaña. ¡Tenemos que aprovechar que está a solo 20 minutos de Potrerillos! Y que sea una experiencia educativa, una experiencia para repasar la historia, los distintos usos de estos cultivos. El cáñamo tiene mucha historia en Mendoza, ¡se desarrolló incluso antes que la vid!”, destaca el responsable del proyecto Gonzalo Llamas Bianchetti, quien adquirió para este emprendimiento un terreno de 5 hectáreas en Vallecitos y quien, en un principio -y antes de que termine 2025- tiene previsto destinar media hectárea del lugar al cultivo de cáñamo.
Si bien en Argentina ya existe una experiencia similar (UNGE, en la provincia de La Rioja), este proyecto mendocino se convertiría en el primero en altura (en plena Alta Montaña). Además de los cultivos (primero de cáñamo, para el que ya cuenta con autorización, y luego -de aprobarse la ley- de cannabis), el objetivo del emprendedor es incluir 15 domos y que sea una opción turística para aprender de la historia de estas plantas y quedarse a pernoctar en el lugar.
“La idea de hacer algo turístico y educativo, siempre vinculado al interés de aprender de cultivo y de la planta. Es todo un mundo, donde intervienen los terrenos y sus características, los olores. Y la idea es educar en todo eso. Incluso, está la posibilidad de hacer eventos especiales, como por ejemplo sunsets temáticos, pero sin consumo” agrega el responsable del incipiente "Proyecto Vallecitos".
Como emprendedor, Gonzalo Llamas Bianchetti fundó su propia industria metalúrgica y su firma de exportación comercial de productos plásticos (con foco en Chile). Y, de la mano de este nuevo proyecto, apunta a incursionar en el turismo cannábico.
En 2024, Llamas Bianchetti obtuvo la aprobación de los planos para la habilitación turística. A ello se suma que a nivel nacional tiene la licencia de la Agencia Regulatoria de la Industria del Cáñamo y del Cannabis Medicinal (ARICCAME) con la condición de producir cáñamo -en un principio-, mientras que la tercera pata en que se sostiene el Proyecto Vallecitos se sustenta con la reciente renovación anual ante el Instituto Nacional de Semillas (INASE) para que el mendocino produzca su propia semilla.
"Esta renovación, junto con la reciente obtención de la licencia otorgada por ARICCAME, refuerza nuestra seguridad jurídica y nos brinda la confianza necesaria para seguir avanzando con determinación en el desarrollo sustentable del cannabis y cáñamo en Mendoza. Además, nos mantenemos expectantes y positivos ante la inminente modificación de la Ley Provincial 9.298, convencidos de que esta reforma impulsará con mayor fuerza y claridad el crecimiento responsable y sostenible de esta industria innovadora en nuestra región", se explaya Llamas Bianchetti
Mientras que los primeros cultivos de cáñamo (ya están autorizados y, en un principio, serán experimentales) se harán antes de fin de año en este predio de Vallecitos, ubicado al costado de la ruta Francisco Guiñazú y lindante con un arroyo, la idea es avanzar con el cannabis -para uso medicinal- en caso de que avance la propuesta de la Provincia de Mendoza en la Legislatura.
“Apuntamos a que sea un proyecto de turismo cannábico”, resalta.
El cáñamo es una variedad de la planta Cannabis sativa. Se trata de una hierba que contiene fibra, semillas y aceite. Este aceite suele utilizarse para fabricar productos industriales, entre ellos textiles, materiales de construcción, papel, telas, jabón, alimentos, suplementos alimentarios y cosméticos. Por esto mismo es que la idea de Llamas Bianchetti es construir las coberturas de los domos para alojarse en el lugar con este mismo material.
"Ya empezaron las obras en el lugar. La idea es construir 15 domos de alojamiento -que voy a hacer yo, aprovechando que trabajo en la metalúrgica-, mientras que para septiembre u octubre busco que 3 de esos domos ya estén habilitados y abiertos al público", destaca.
En cuanto al cultivo propiamente dicho, la planificación del responsable de "Proyecto Vallecitos" es comenzar con el cultivo de cáñamo en diciembre (por lo general la temporada empieza en septiembre, pero por las condiciones de Vallecitos, hay heladas hasta diciembre), mientras que la primera cosecha sería en marzo.
"Entre septiembre y octubre se va a hacer un cultivo experimental, mientras que en diciembre la idea es avanzar con un cultivo más grande. Y se va a hacer en media hectárea de las 5 que hay en el lugar", explica.
Con esta iniciativa pionera, Llamas Bianchetti apunta a desarrollar variedades de cannabis adaptadas a las condiciones de Alta Montaña (casi 3.000 msnm) y trabajando en fitomejoramiento, adaptación genética y cultivo sostenible. El objetivo es posicionar al proyecto como referente turístico, con el impulso de un impacto económico, social y ambiental positivo para la región.
Si bien hasta entonces Gonzalo Llamas Bianchetti estaba enfocado en la industria metalúrgica y la exportación de productos plásticos a Chile, fue en 2022 cuando surgió el primer rastro del proyecto de turismo cannábico en la vida del hombre de 40 años.
La ley 27.350 (nacional y que autoriza la investigación en cannabis para uso medicinal) fue reglamentada ese año, por lo que Gonzalo se inscribió y gestionó su permiso en el Reprocann (Registro nacional de personas autorizadas al cultivo de cannabis controlado con fines medicinales y/o terapéuticos).
Ya con la reglamentación de la 27.350, el emprendedor mendocino se inscribió en el INASE (Instituto Nacional de Semillas) como criadero y alquiló -con opción de compra- por dos años un terreno de 5 hectáreas en Vallecitos, antes de llegar a los caracoles.
“Desarrollé una variedad de semilla que traje de Chile (Viña del Mar), y me tomó 6 meses adaptarla a Mendoza y sus condiciones. Imaginate que venía de estar a nivel del mar y con humedad y la tuve que adaptar a la altura y a un clima seco. Cuando logré adaptarla, inscribí esa variedad. Pero tenía que esperar un año para confirmar que la variedad de la semilla fuese estable”, se remonta en el tiempo Llamas Bianchetti.
Y aunque aún era una idea, el ambicioso proyecto iba tomando forma en su cabeza, mientras que ya contaba con los permisos correspondientes y hasta el terreno para este campo de cultivo donde iba tomando forma el proyecto de turismo cannábico. Entre otras cosas, dejó de alquilar y se convirtió en el propietario de esos terrenos.
“La idea es que entre los próximos 3 y 5 años ya esté todo el proyecto desarrollado y habilitado, con los 15 domos. Buscamos que sea un lugar de estadía, pero también de eventos puntuales y sunsets, por ejemplo. Siempre apuntando a lo educativo, a dar charlas, a contar la historia del cultivo y enseñar", aclara el mendocino, quien sueña con tener los primeros 3 domos listos y habilitados antes de fin de año, cuando -prevé- comience la primera experiencia de cultivo.