Hacía años que no se veían, pero siempre estaban en contacto. La excusa para volver a trabajar juntos fue un asado, que resultó el comienzo de la obra "Se alquila".
Santiago Stieben y Diego Mesaglio, en los '90 fueron Roña y Corcho, los personajes de la tira infantil "Chiquititas". Pero por fortuna la química que tuvieron en la ficción pervive dos décadas después y el año pasado estrenaron esta comedia española, dirigida por Alfonso Burgos, otro joven actor que comenzó su carrera en la factoría de Cris Morena. Después del éxito y la popularidad que consiguieron en la tira televisiva, cada uno continuó con su carrera artística y ahora se reúnen pero en el teatro.
"Se alquila" llega esta noche en una única función al teatro Selectro, es una adaptación de la puesta española escrita por Gonzalo Ferreño, que tendrá la participación del fo
tógrafo mendocino Martín Orozco en una de las escenas.
"Con Alfonso y Santiago organizamos un asado y mi excusa fue que iba, pero para hacer negocios. Y surgió la idea de hacer teatro. Cada uno estaba con otros proyectos, yo estaba grabando la segunda temporada de 'Un gallo para Esculapio' y Alfonso es profesor y director de teatro. Ahí comenzamos a buscar una obra y nos costó conseguir una comedia de solo dos personajes. Hacemos todo nosotros tres; dirección, actuación, vestuario, escenografía, logística", detalla Diego Mesaglio, quien interpreta a Rafa, un desestructurado hombre que busca alquilar una habitación.
Del otro lado está Andrés (Sebastián), un joven profesional desocupado de 30 años, estructurado, elegante y ordenado que decide alquilar una de las habitaciones de su departamento para compartir gastos. En esa búsqueda se cruza con Rafa y de esa reunión resulta la trama de la comedia, que debutó con éxito en la calle Corrientes.
-¿Cómo fue la respuesta del público?
-Muy buena. Hicimos una primer temporada en calle Corrientes, solo los sábados y por suerte siempre con localidades agotadas. Y la segunda temporada también se mantuvo. Después vino la gira por la costa, La Plata. Ahora Mendoza, San Juan y a fin de mes volvemos a la calle Corrientes.
-Les salió bien el plan de hacer negocios.
-Sí. Fue el asado más productivo de mi vida (ríe).
-¿Cómo resolvieron la adaptación del texto?
-Fue un trabajo muy grandes, porque es una comedia española que habla de la actualidad, costumbres propias. Y nos llevó un buen tiempo hacer una adaptación argenta y sumamos un par de cosas, que funcionan a la perfección en el escenario.
-¿Cómo fue esa experiencia de volver a trabajar juntos?
-La verdad que aceptamos la química y la conexión que tenemos. Y eso quedó después de veinte años. Porque después de “Chiquititas” no trabajamos juntos. Y volver a trabajar y que pase eso, es muy bueno.
-¿Te molesta que te identifiquen con tu actuación en "Chiquititas"?
-No, para nada. Al contrario, igual yo empecé en la tira en el ‘95 y antes había hecho otras series, películas, “Sin Condena”. Pero no niego que la tira fue un antes y después en mi carrera. Y si la gente te sigue recordando es porque le gusta tu trabajo, de la mejor manera. Y ahora van al teatro chicas que miraban “Chiquititas” y van con sus hijas que lo miran por Youtube.
En 2014, Diego Mesaglio sufrió un accidente doméstico y perdió la visión de un ojo, por lo que estuvo tres años alejado de la pantalla y volvió al ruedo de la mano del unitario “Un gallo para Esculapio”, dirigido por Sebastián Ortega.
-¿Tenés algún proyecto para televisión?
-Lo que se está programando es la tercera temporada de “Un gallo...”, con la posibilidad de hacer dos temporadas juntas. Pero por ahora estoy abocado a la obra y al ser solo tres personas es mucho trabajo y más cuando jugás en grandes ligas y hacer una gira.
-¿Te afectó tu accidente en el trabajo?
-El cuerpo y la estética es un ochenta por ciento del trabajo. En su momento me favoreció. De hecho Sebastián Ortega me lo dijo de la mejor manera y para el papel de “Un gallo...” encajaba justo. Y desde el momento que pude volver a trabajar, lo hice. Soy consciente de que en el laburo de la tele y el cine, un gran punto es el cuerpo. No estoy hablando de si alguien es morocho, rubio, flaco o gordo. Esto es algo que no se puede evitar. Y soy consciente de que si no me dan un papel por mi ojo, más no puedo hacer. Por suerte tengo trabajo y por ahora no fue ninguna traba.
La ficha
Se alquila. Nada es lo que parece
Dirección: Alfonso Burgos. Actúan: Diego Mesaglio y Santiago Stieben.
Día y hora: hoy, a las 22.
Lugar: Teatro Selectro (Capitán de Fragata Moyano 102).
Entrada: $350 (general).
En www.eventbrite.com.ar y en boletería del teatro (de 11 a 15 horas, solo efectivo).