Un informe de la Fundación ProTejer explica el valor de la ropa en Argentina y cómo participan los distintos sectores en el precio que abona un consumidor por una prenda fabricada por la industria nacional en un centro comercial.
Fundación ProTejer es una organización sin fines de lucro cuya misión es asistir, desarrollar, contener e integrar a la cadena de valor agro-industrial textil y de confecciones de Argentina.
"Se dice de manera general que la ropa es cara en Argentina y que la culpa de esta situación la tiene la industria nacional. Esta afirmación es falsa. En realidad en Argentina hay ropa baratísima, barata, de precio normal, cara y ropa carísima. Ocurre que la percepción pública toma como referencia el precio de la ropa de marca comercializada en shoppings. Esta prendas, tanto importadas como nacionales son, lógicamente, de precios altos", empieza el informe para dar de lleno con los detalles.
Para explicar la composición del precio de la ropa, Fundación ProTejer recurre a un ejemplo: una remera de $600 de cualquier marca que se vende en un local de un shopping.
-El 50,3% de ese valor se destina a impuestos. Ellos corresponden a las distintas etapas de producción y comercialización de la prenda. Se contempla el IVA, Ingresos Brutos, Impuesto a las ganancias, a los débitos y créditos bancarios entre tantos otros.
-El 12,7% se destina al pago del alquiler del local comercial. No es sólo alquiler, sino que se le suman expensas, fondo de publicidad inicial y mensual del shopping, llave de contrato, etc. El 12,2 es la incidencia del sistema financiero por operar con tarjetas de crédito o débito. El 9% se utiliza para el pago de los gastos asociados a la logística y comercialización.
-El 4,8% del valor de a remera es rentabilidad de la marca comercial. El 2,8 es la participación de las actividades de diseño y publicidad que son herramientas indispensables en la comercialización de este tipo de prendas de marcas reconocidas.
-La industria textil que hizo la remera se lleva sólo el 8,5% que corresponde al costo de fabricación de la prenda de vestir preparada para su venta final. Este costo incluye la actividad de toda la cadena de valor que interviene en la producción de la ropa (productor de algodón, lana o fibra sintética, desmontador, hilanderías, tejedurías, tintorerías, lavaderos, confeccionistas, etc.)
Si la remera cuesta 600 pesos en un shopping
-$301,89 son los impuestos
-$76,2 se destinan a pagar el alquiler
-$73,2 se usan para pagar a los bancos
-$54 representan el gasto logístico y de comercialización
-$51 son los que se lleva la industria textil
-$18,8 son destinados a la rentabilidad de la marca
-$15 son para publicidad y diseño
Para cerrar el informe, ProTejer asegura que la industria textil nacional no tiene falta de competitividad y que la apertura de importaciones no soluciona nada sino que generan desempleo.
"Lo que encarece el producto son los impuestos. ¿Por qué se pretende que sea la industria la que ajuste cuando existe un problema de competitividad sistémica en nuestro país, explicado basalmente por la vigencia de una alta carga fiscal y la existencia de otros sectores como el financiero y la renta inmobiliaria que contribuyen mayoritariamente en la formación del precio final de la ropa? La industria no es el problema, la industria siempre es la solución", concluye el comunicado.