La curiosa historia del pionono y su estrecha relación con una figura de la Iglesia

En muchos lugares del mundo existe un sabroso postre preparado con un bizcochuelo, algún tipo de relleno dulce y que se sirve enrollado. Sin embargo, pocos saben que nació como un homenaje.

El delicioso postre en honor a un Papa
El delicioso postre en honor a un Papa

El pionono, un exquisito postre presente en diversas partes del mundo y en nuestro país, esconde tras su sabor una historia ligada al Beato Papa Pío IX, un ilustre pontífice de la Iglesia Católica.

Pío IX, conocido también como Pío Nono, fue Papa durante un extenso período de más de 31 años, constituyendo uno de los pontificados más prolongados en la historia de la Iglesia, solo superado por el de San Pedro.

Nacido en septiembre de 1792 en Senigallia, Italia, Pío IX fue ordenado sacerdote el 10 de abril de 1819. Su ascendente carrera lo llevó a ser designado Arzobispo de Spoleto a una temprana edad, contando solo con 35 años. Falleció el 7 de febrero de 1878.

El Beato Papa Pío X (Pío Nono)
El Beato Papa Pío X (Pío Nono)

El Beato Papa Pío IX es recordado especialmente por su proclamación del dogma de la Inmaculada Concepción de la Virgen María el 8 de diciembre de 1854, un hito importante en la doctrina católica.

La historia del pionono se remonta al año 1897, en la pintoresca localidad de Santa Fe, en Granada, España. Ceferino Isla González, fundador de las reconocidas Pastelerías Casa Isla, era un ferviente devoto de la Madre de Dios y deseaba rendir un sincero homenaje al Pontífice por su proclamación del dogma mariano.

Un postre simple y lleno de sabor
Un postre simple y lleno de sabor

Así, inspirado por la devoción y el espíritu religioso, Ceferino Isla González creó el delicioso postre que hoy conocemos como pionono. Con su bizcochuelo suave y esponjoso, relleno de dulce y enrollado con maestría, el pionono se convirtió en un tributo gastronómico al legado espiritual del Beato Papa Pío IX.

Desde entonces, el pionono ha deleitado paladares y se ha convertido en una delicia presente en la mesa de muchas familias, manteniendo viva la memoria de aquel hombre de fe cuya proclamación marcaría un hito en la historia religiosa.

Otro postre inspirado en la fé catolica son las berlinesas o “bolas de farile”. El nombre hace alusión a las borlas o nudos del Cordón de San Francisco de los frailes. Según cuenta la historia, en 1887 se creó por iniciativa de los anarquistas italianos Errico Malatesta y Ettore Mattei la llamada Sociedad Cosmopolita de Resistencia y Colocación de Obreros Panaderos en la Ciudad de Buenos Aires.

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