Mientras se espera que los pliegos del juez federal Ariel Lijo y el académico Manuel García-Mansilla lleguen al Senado de la Nación para su discusión, los mendocinos que integran la Cámara mantienen la cautela y no se definen abiertamente sobre cada uno. Sin embargo, dejan ver algunas preferencias, que anticipan posicionamientos. El gobernador Alfredo Cornejo aún no fue contactado por el gobierno nacional sobre este tema.
Desde el dúo radical que componen el exgobernador Rodolfo Suárez y Mariana Juri ven con buenos ojos a García-Mansilla por su trayectoria académica, pero se reservan los comentarios sobre el juez federal Lijo, más “cercano” al peronismo. Vale recordar que estos legisladores mendocinos se ubican en la denominada “oposición dialoguista”, con el propósito de tender puentes con el oficialismo y no saldrían a rechazar un nombre propuesto por Javier Milei de la nada.
“Ni siquiera han ingresado los pliegos al Senado y lo más prudente sería esperar a qué sucediera. Lo que puedo decir es que, en el caso de García-Mansilla, tiene antecedentes académicos y un caudal de formación destacable. Pero esperaremos por los pliegos de los candidatos”, se limitó a decir ante Los Andes la senadora Juri, que integra la Comisión de Acuerdos a la que llegan estos pliegos.
La posición de Suárez es similar a la de Juri, según pudo saber este medio. Mientras que Anabel Fernández Sagasti prefiere el silencio y su entorno se limita a decir que el bloque de Unión por la Patria rechaza que postulen a un varón en el lugar vacante que dejó Elena Highton de Nolasco. Cabe resaltar que para tal cargo se anunció a Lijo y en reemplazo de Juan Carlos Maqueda, que cumplirá 75 años a fines del corriente, aparece García-Mansilla.
Sobre este último surge un fuerte rechazo por su posición en contra del aborto legal y haberse opuesto con firmeza al juicio político contra la Corte Suprema, promovido durante el gobierno de Alberto Fernández. En tanto que Lijo no tiene tantas resistencias, siempre y cuando se respete un cupo femenino, aseguran en el sector peronista.
Desde el radicalismo mendocino analizan esa postulación como un claro “guiño” para la oposición más dura en la cámara, ya que se requieren dos tercios de los votos de la cámara para la aprobación de los pliegos. Es decir que el oficialismo debe negociar con el peronismo (33 votos) sí o sí, ya que debe reunir 48 votos para nombrar a un supremo. Además, advierten que todavía hay que esperar sí efectivamente son postulados como reemplazos tal como fueron anunciados o se da un enroque.
A todo esto, el gobernador Alfredo Cornejo no recibió ningún contacto sobre el anuncio de estos nombres, informaron fuentes de la UCR. Y tampoco se ha expresado públicamente hasta el momento.
“El Dr. Lijo actualmente ejerce como Juez Federal de la Nación y se ha destacado en su prominente carrera judicial en el ámbito penal, mientras que el Dr. García-Mansilla es un prestigioso académico con una sólida formación en derecho constitucional y se desempeña como Decano de la Facultad de Derecho de la Universidad Austral”, dijo el Gobierno al presentar a los candidatos que “permitirán reestablecer el número de ministros de la Corte Suprema a cinco”, la semana pasada.
Nacido en 1968, en CABA, egresado de la Universidad de Buenos Aires (UBA), Lijo fue nombrado juez federal en 2004, a propuesta del expresidente Néstor Kirchner, sobre un concurso del que también participaron Guillermo Montenegro, Daniel Rafecas y Julián Ercolini. En noviembre de 2017, Lijo, a diferencia del juez Jorge Di Lello, ordenó la detención de Amado Boudou en una causa por enriquecimiento ilícito. La causa sigue en proceso. También intervino en causas judiciales de Cristina Fernández de Kirchner y Mauricio Macri.
García Mansilla, nacido en 1970 en Bariloche, es decano de Facultad de Derecho de la Universidad Austral desde 2019, y director ejecutivo de la Cámara de Exploración y Producción de Hidrocarburos (CEPH). Integra el influyente estudio Liendo & Asociados. “Especialista en Derecho Constitucional, Oil & Gas y Derecho Empresario”, dice en Linkedin, un perfil que se ajusta a la agenda de desarrollo y desregulación del sector energético que persigue el gobierno de Milei. “Abogado de las petroleras”, resumen algunos.
Los pasos para nombrar a un supremo
El mecanismo para la selección de los jueces está establecido en el decreto 222/2003 dictado por el expresidente Néstor Kirchner. Allí se establecen los pasos que deben cumplirse antes del envío de los pliegos, que incluyen entre otras cosas la publicación de los antecedentes curriculares de los candidatos y la presentación de declaraciones juradas. También se contempla para la sociedad civil la posibilidad de presentar adhesiones o impugnaciones.
El Gobierno anunció el miércoles pasado que modificará ese decreto, y aunque no brindó detalles, todo indica que buscarán comenzar el trámite parlamentario antes de que se produzca la vacante a cubrir, con el fin de evitar que la Corte vuelva a quedar mermada a fin de año, cuando Maqueda se jubile (cumple 75 años el 29 de diciembre).
El primer paso para activar el debate parlamentario es que el Ejecutivo envíe los pliegos a la Cámara Alta. El tratamiento comenzará entonces en la Comisión de Acuerdos, que nombró como presidenta a Guadalupe Tagliaferri, una senadora del PRO por la Ciudad de Buenos Aires que tiene diálogo con el expresidente Mauricio Macri.
De los 17 miembros de la comisión, siete son de Unión por la Patria, que tiene figuras de peso como el jefe del interbloque, José Mayans, su vice, la mendocina Anabel Fernández Sagasti, y las senadoras Juliana Di Tullio y Alicia Kirchner. Le sigue la UCR con cuatro integrantes (entre ellos, Martín Lousteau), el PRO con dos, y La Libertad Avanza con uno solo: el presidente del bloque, Ezequiel Atauche. Los tres restantes pertenecen a sellos provinciales: el salteño Juan Carlos Romero, el correntino Carlos “Camau” Espínola y el misionero Carlos Arce.
La comisión debe emitir dictamen sobre cada nombramiento, y finalmente deberán votarse en el recinto con mayoría especial. En el decreto de Kirchner se establece que, al momento de evaluar a los candidatos, se debe tener en cuenta que la composición de la Corte refleje “las diversidades de género, especialidad y procedencia regional en el marco del ideal de representación de un país federal”.
Lijo es oriundo de la Ciudad de Buenos Aires, y García-Mansilla, de Río Negro. Entre los actuales, Horacio Rosatti (presidente) y Ricardo Lorenzetti son de Santa Fe; Carlos Rosenkrantz, de CABA; y el saliente Maqueda, de Córdoba. Como queda a la vista, la Corte además no tendría ninguna integrante mujer.