Ocurrió este viernes en la ciudad de Fontana. La víctima había desaparecido tras salir a comprar a un kiosco.
Encontraron muerta a una menor de 13 años en Chaco.
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Este viernes fue encontrada asesinada una adolescente de 13 años en la ciudad de Fontana, provincia de Chaco. La víctima, identificada como Sol Selena Gómez Montiel, había sido reportada como desaparecida por su familia en horas de la tarde, poco antes de su hallazgo.
En relación con el crimen, un joven de 18 años, vecino del barrio, fue detenido, ya que se encontraba en el lugar donde fue hallado el cuerpo.
Según informaron fuentes policiales, alrededor de las 15 horas, una mujer denunció en la Comisaría Segunda de Fontana que su hija de 13 años había salido de su hogar en el barrio Independencia para ir a un kiosco cercano y no había regresado.
De inmediato se activó el protocolo de búsqueda, notificando a las unidades policiales y a las divisiones especiales. Mientras tanto, los familiares de la adolescente comenzaron a pedir ayuda desesperadamente en las redes sociales.
Poco después de las 16 horas, la Policía recibió un llamado solicitando la presencia de efectivos en una casa del barrio Aipo. Según versiones no confirmadas oficialmente, el aviso habría sido realizado por un familiar del joven detenido.
Al llegar al lugar, los agentes encontraron el cuerpo sin vida de la menor dentro de la vivienda. En ese sitio, procedieron a arrestar al joven de 18 años, quien está señalado como el presunto responsable del asesinato.
El acusado fue trasladado a Medicina Legal para someterse a un examen médico y luego fue llevado a una unidad policial, según lo informado en el parte oficial.
En el lugar del hallazgo, trabajaron los peritos de Medicina Legal y el Gabinete Científico, quienes realizaron las primeras diligencias para avanzar en la investigación, que quedó bajo la responsabilidad de la fiscal de Investigación Penal N°3, Rosana Soto, quien también se hizo presente en el lugar.
Tras conocerse la noticia, familiares y vecinos de la víctima se reunieron en las cercanías de la vivienda, exigiendo justicia por el crimen. Ante el aumento de la tensión, varios patrulleros y efectivos del cuerpo de Infantería establecieron un cordón de seguridad frente al inmueble para prevenir posibles disturbios.