Según fuentes policiales, se le tomó declaración a la mujer, junto con otras cuatro personas que también viven en Perico, al norte del país.
Lian Gael Flores Sorarire, desaparecido en Córdoba.
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La casa de la curandera jujeña, que se encuentra bajo la mira de la Justicia cordobesa por su presunta vinculación con la desaparición de Lian Flores, fue allanada en el marco de la causa. Durante el operativo realizado en Perico, agentes policiales secuestraron varios elementos de interés para la investigación.
El allanamiento se llevó a cabo en la vivienda de “La Abuelita” -como le dicen a la mujer-, con el objetivo de obtener información relevante sobre su llegada a Ballesteros Sud antes de la desaparición del niño de 3 años. Se incautaron celulares, pasajes de colectivo y un bolso con ropa, los cuales serán analizados en las próximas horas.
Además, se tomó declaración a la mujer, junto con otras cuatro personas que también viven en el mismo domicilio. Tras las pericias, ninguno de los interrogados fue detenido.
En los últimos días, la curandera había quedado en el foco de la investigación debido a un mensaje que presuntamente le había enviado Elías Flores, el papá de Lian, y que decía: "Ya tengo listo lo tuyo".
José Alfredo Blanco, fiscal a cargo del operativo, dialogó con el medio El Tribuno y comentó: “La mujer de 74 años afirmó ser curandera y que viaja seguido a Córdoba para asistir a integrantes de la comunidad boliviana”.
Blanco también señaló que este dato es clave en la causa, ya que la familia de Lian Flores es de nacionalidad boliviana y se había instalado en Ballesteros Sud hace algunos años. “(La mujer) indicó que viajó a Córdoba el pasado 14 de febrero y regresó el sábado 22. Declaró que llevaba consigo un bolso grande con ropa”, agregó el fiscal.
En cuanto a la posible detención de la mujer, Blanco explicó: “Finalizado el mismo, consultamos a la Fiscalía de Córdoba si se procedía a la detención de la mujer, nos respondieron que no, que se realicen las entrevistas que fueron tomadas a todos los que vivían con ella, al marido y a los hijos”. En la entrevista, la mujer aseguró que no tiene parentesco con el niño desaparecido.
Por último, el fiscal detalló: “Según lo que declaró la mujer, en Córdoba hace curanderismo, y que si bien son de la comunidad boliviana, están en mejor posición económica. Además de pagarle, le regalan ropa, calzado y juguetes, que ella trae y entrega a familiares y conocidos”.