La performance del sector vitivinícola en la provincia de Mendoza tiende a poner sombra sobre el resto de las actividades productivas de la zona. Es el rimbombante sector del vino el que acapara todas las miradas. Razones existen de sobra, es que además de ostentar la representación de la provincia en el mundo gracias al valor agregado de sus productos, también derrama beneficios hacia otros sectores, siendo el principal el turismo.
Al margen de su incipiente recuperación en las exportaciones, lo cierto es que la provincia no es solo vino, aunque este sea el más llamativo.
Un ejemplo: las exportaciones del sector hortícola de Argentina han registrado un significativo crecimiento, alcanzando un total de USD 226,4 millones entre mayo de 2023 y abril de 2024. Este monto representa un incremento del 54,9% respecto al mismo período del año anterior, según el reciente informe del Monitor de Exportaciones de las Economías Regionales (MEER), elaborado por la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).
Un dato a tener en cuenta es que la provincia de Mendoza se ha consolidado como la principal exportadora del complejo hortícola, aportando USD 81,2 millones al total nacional, con el ajo como principal producto de exportación. Aunque los datos del INDEC también muestran muy buenos resultados para exportaciones de cebolla, zanahoria, entre otros.
Otro dato es que a pesar de tener una superficie cultivada en franco descenso, la provincia ha tenido excelentes resultados en exportaciones de aceite de oliva, casi duplicando los resultados para el primer trimestre del año. Las frutas de carozo también mostraron mejoras. Uno de los sectores más pujantes y con grandes avances tecnológicos es el de la cereza, hoy diseñada desde el campo para venderse en el mercado asiático. Marca Mendoza en el mundo.
Teniendo en cuenta estos logros, es necesario comenzar a pensar en la provincia nuevamente como un complejo diversificado. La vitivinicultura sigue haciendo un gran aporte, pero hay otros cultivos que empiezan a tener su propio peso en el mundo. Estos resultados no han llegado solos sino acompañados por precios internacionales favorables e inversión privada para hacer producciones eficientes y con demanda en otros mercados.