Cuando un centro de fertilización de Los Ángeles, Estados Unidos, comenzó a ofrecer "niños de diseño" se hizo noticia en todo el mundo. Según la publicación, ya se podía elegir el color de pelo y hasta el sexo para "balancear" la cantidad de niños y niñas en una familia. Pero quienes realmente estudian el tema leyeron la noticia con escepticismo.
"Hay mucho folclore detrás de la genética. Los niños a la carta no existen. Nadie puede garantizar el diseño de un niño", asegura Norma Magnelli (81), una de las médicas genetistas más reconocidas y recientemente nombrada Ciudadana Ilustre de Mendoza.
Doctora en medicina, comenzó a estudiar a finales de la década del 50 y se graduó en 1962. Becada por la Fundación Rockefeller, estudió en Brasil y Estados Unidos para regresar a Mendoza. "Nunca pensé en irme para siempre", asegura. De hecho, vive en la misma casa en la que creció con sus padres, en la Quinta Sección. Profesora emérita de la Universidad Nacional de Cuyo y fundadora del Instituto de Genética Médica, del que fue titular, tiene una mente tan lúcida que colegas la consultan por temas académicos.
Y echa por tierra los mitos de una disciplina que cuando ella se graduó era extraña, pero que hoy está de moda. "Yo estaba en Clínica Médica hasta que llegó a la Facultad de Medicina un hombre con una de las llamadas 'enfermedades raras'. Y me interesé mucho", cuenta.
Y agrega: "El hombre tenía hemocromatosis, una patología que hace que el cuerpo acumule más hierro del que necesita y que daña los órganos. Compré libros en Buenos Aires porque aquí no había. Me puse a estudiar. Eran temas de difícil lectura, pero apasionantes. En esa época, los libros ni siquiera traían la cantidad correcta de cromosomas que tiene el humano".
Tanto fue el empeño que puso por entender cosas tan nuevas, que el titular de Clínica Médica le propuso que empezara a dedicarse a la genética. "Lo pensé dos años", admite.
Hasta que se decidió y ganó las becas. En los 50 y los 60 era muy raro que se hablara de genética, pero ahora hay clínicas que prometen bebés de diseño.
-¿Se pueden fabricar bebés a la carta, con cierto color de ojos o sexo?
-Los bebés a la carta no existen. Es un mito. Todos los seres humanos tenemos al menos cinco genes malos, lo que se considera la carga genética de la especie humana y que eventualmente pueden causar alguna enfermedad o discapacidad. Nadie puede garantizar la perfección. Por otra parte, ¿qué es la perfección? Para unos puede tratarse de un rasgo en particular y para otros algo muy diferente.
-¿El humano trae todo escrito en sus genes desde qué momento?
-Desde que es un cigoto (célula que resulta de la unión de las células sexuales masculina y femenina). El cigoto ya tiene toda la información genética, el mapa de la vida desde la concepción hasta la muerte.
-¿Qué pasa con los 10 mil embriones que se dice están congelados en Argentina, guardados, sin destino cierto? ¿Son personas congeladas?
-En realidad no se sabe cuántos embriones hay congelados. Se necesitan condiciones especiales, ignoro si esas condiciones existen. Además muchos de estos procedimientos se hacen en clínicas privadas que no entran en las estadísticas. Personalmente, nunca he trabajado en estos temas, mi ámbito ha sido el estudio de pacientes con probables enfermedades genéticas y mi mayor interés ha sido la citogenética humana.
-La medicina ha avanzado hacia la creación de embriones, la fertilización, el alquiler de vientres ¿Hasta dónde se puede llegar?
-El futuro es incierto, no sabemos qué van a pensar y qué van a querer saber los adultos que nacieron de una madre que alquiló su vientre para que ellos nacieran. Tal vez van a querer conocerla, saber si tuvo más hijos. Tanto se trate de óvulos o de espermatozoides donados, algunas personas con ese origen van a pensar o querer saber si tienen medio-hermanos, abuelos. Todo ser humano cuando crece quiere saber de dónde viene. Hay que ver qué se les dirá a esas personas. El derecho a la identidad es un derecho humano. Esos niños se van a preguntar “¿quién era mi papá o mi mamá?”.
“Si alquilaron un vientre ¿Esa mujer que es mi mamá tiene más hijos?”. Una cosa es tener papá o mamá ausente o muertos pero saber quiénes son y otra es no saber nada de nada.
-¿Puede haber un futuro apocalíptico con la genética?
-Es una disciplina que puede hacer mucho bien para quienes buscan su identidad, para la resolución de casos, para la prevención de enfermedades. Durante años hicimos medicina preventiva, informando a las familias sobre riesgos altos de que los hijos tuvieran enfermedades graves.
-¿Se puede saber qué enfermedades vamos a tener con un estudio?
-Se pueden predecir ciertas enfermedades. Hay ciertas personas que tienen alto riesgo de padecer cáncer de mama, cáncer de colon o de pulmón y hay estudios que permiten informar así a las personas y que puedan controlar mejor sus estudios.
-¿Qué mito sobre la genética debemos desterrar?
-El mito de que se hereda todo. Antes se decía “le pasa esto como al bisabuelo tal”.
¿Cómo iban a saber quién era el bisabuelo o qué había tenido en un país de inmigrantes como el nuestro? No se hereda todo. Cada uno tiene su mapa genético, su genoma. Y el medio ambiente puede influir en la aparición de enfermedades.
-¿Somos capaces de crear vida o de diseñarla o mezclar especies?
-De ninguna manera. Ni siquiera los criadores de perros pueden. Tienen los mejores perros para cruzarlos pero siempre hay cachorros que salen mal. En esos casos, puede sonar muy crudo, los descartan, lo exige el comercio. Los humanos no se descartan, se cuidan y se atienden como corresponde.
Perfil
Norma Magnelli fue la primera mujer decana de la Facultad de Ciencias Médicas de la UNCuyo. Ejerció esa función durante dos períodos estatutarios consecutivos.
Ha sido titular del Consejo de Investigaciones de la UNCuyo y de la Sociedad Argentina de Genética. Creó la cátedra y el Instituto de Genética en la Facultad de Ciencias Médicas y supo organizar la Fundación Universidad Nacional de Cuyo (FUNC), de la que fue primera titular. Como decana impulsó la compra del antiguo hospital Ferroviario, para convertirlo en el hospital Universitario.
Ha publicado numerosos artículos científicos en revistas especializadas nacionales y extranjeras.
