Fue uno de los nombres más repetidos por la prensa en 2018. Nahir Galarza, tras pasar casi un año en la cárcel, y después de meses de dudar si hablar o no con la prensa, permitió que el periodista Rodolfo Palacios lo entrevistara. El encuentro duró una hora y fue transcripto por el medio Infobae. No se permitieron imágenes. ¿Lo más destacado? Quizá una frase que en la que el periodista, ¿sin querer?, puso al filo de desbarrancar la estrategia de la defensa de Nahir: negar el vínculo emocional que tuvo durante casi cinco años con Fernando. "¿Te gustaría enamorarte otra vez?", indagó el periodista. "La verdad que no lo he pensado. De lo que sí estoy segura es que todo lo que pasé me sirvió para darme cuenta de muchas cosas. Creo que ahora tengo un pensamiento más libre, una mente más abierta. No repetiría muchas cosas. No lo pensé, pero creo que no tendría problemas en enamorarme".
¿Lo más dificil que ha vivido tras las rejas?
"Creo que la parte más difícil ya la pasé en la comisaría, donde estaba sola. Al no tener nadie con quien hablar, nada para hacer, ocupaba mi tiempo pensando. En realidad los primeros dos meses, enero y febrero, directamente no pensaba, no sentía nada. Seguía en shock, no caía en la realidad. Después lo pude hacer cuando empecé a tener una contención psicológica, me fue a ver una psicóloga y ahí sí fue como que después de unos días de terapia caí en la realidad. Se me vino todo el mundo abajo de repente, volver a revivir todo, y pensar todo lo que me había pasado, no solamente en ese momento y en ese día, sino anteriormente. Los años anteriores; porque esto no viene de ese año o ese día, viene de años anteriores desde mucho tiempo. Creo que la peor parte ya la pasé, porque estaba sola y no tenía a nadie, solo a mí misma, así que cambié mucho en mi forma de ser, mis pensamientos, creo que estar solo te cambia, no tenés a nadie más que a vos mismo, y me tenía…creo que no me quedaba otra que revivir todo y… (hace una pausa, piensa) ahora, por ejemplo, al tener compañeras es distinto, vos por ejemplo podés hablar con alguien y dar opinión o consejos, charlar de cualquier cosa, no necesariamente del por qué estás acá, es más, tratamos de evitar hablar de las causas por las que estamos".
La gente critica que sonreís...
A veces sonrío de nervios. Pero siento que no sé… Tengo prohibido sonreír en púbico. La verdad que me molesta que algunas personas no se pongan a pensar. Que solamente vean algo y compren lo que les venden. Que no se pongan en el lugar del otro, que no les importe que el otro es una persona, que no les importe que la otra persona también tuvo sus problemas, su vida, con sus tristezas. A todos les pasa. Que no tengan compasión.
Otras frases salientes
!Me mostraban como una reina. Eran las fotos de mis redes sociales. Creo que fue injusto. Porque en realidad ahora me pongo a pensar, mi causa no es la primera causa en el mundo que existe. Anteriormente y hasta ahora, después del juicio, siguen habiendo casos como el mío. Sin embargo nadie le da importancia como me la dieron a mí. Hay muchos hombres que todos los días matan mujeres y sin embargo esos hombres no sabemos siquiera cómo se llaman, o no nos acordamos, se dice por arriba. A ningún hombre lo han tratado mediáticamente o socialmente como me trataron a mí. Eso es algo que no entiendo por qué. Es más: hasta acá adentro hay chicas con la misma causa o con la carátula como la mía, y sin embargo yo nunca supe de ellas, nunca se escuchó hablar de esos nombres ni nada. Y es exactamente lo mismo. No entiendo por qué hicieron tanta diferencia conmigo, o por qué me dieron tanta atención a mí si es algo que no es nuevo digamos. Eso no quita mi responsabilidad".
"Era incómodo (asistir a las audiencias del juicio). Porque todo el tiempo me tenía que estar cuidando. Me tapaba la cara porque en base a cualquier gesto que yo hacía ya lo sacaban de contexto u hacían todo un análisis, entonces por eso me tapaba la cara y todo el tiempo me tenía que estar cuidando de cualquier cosa porque lo interpretaban para mal. Al juicio fui casi a todas las audiencias porque era mi juicio. Yo quería saber qué se decía porque era yo la que estaba imputada. Los días que no fui emocionalmente estaba muy mal. Llegaba a la comisaría destrozada de las audiencias. El último día creo que el veredicto ya estaba decidido, sabía que iba a ser así, que me estaban esperando, que iban a ver mi gesto cuando me dieran la condena. Para evitar eso, decidí no ir. Yo sabía que la condena ya estaba dicha. Toda la sociedad pedía cadena perpetua y yo sabía que me la iban a dar. Era difícil, estaba en la duda, yo quería ir, pero quería evitar todo eso. Lo mismo porque quizás yo estaba parada y ya lo interpretaban como cualquier cosa. Hasta ahora creo que me afectó psicológicamente. Yo veo no sé… entro a un lugar y lo primero que me fijo es si tiene cámaras. En cualquier lugar al que me lleven, incluso acá adentro me paro a fijarme si hay cámaras escondidas, detalles, micrófonos. Me pasaba en la comisaría, podía pasar horas fijándome si no me habían puesto una cámara. Me afectó mucho psicológicamente hasta el día de hoy. También me llevó a desconfiar de todo el mundo porque cada mínima palabra que yo decía se publicaba o se malinterpretaba, entonces me cuido mucho en ese sentido. Me generó mucha desconfianza, hoy en día no confío en nadie más que en mis padres".
"El año pasado estuve todo el año angustiada, no existió ni un día que no estuviera triste. A mí me gustaba mucho salir los fines de semana, y ni saliendo se me iba la angustia. Era solamente por la situación que estaba pasando, que no fue solamente ese año, fue de mucho tiempo atrás, pero es como que se hizo más profundo, más fuerte, el año pasado. Estaba muy angustiada, no vivía, me la pasaba encerrada, no hablaba con nadie, no podía…ni siquiera podía ir a yoga. Era otra persona, como un ente. Me di cuenta de dónde venía toda esa angustia, justamente quedándome sola todos esos meses en la comisaría de Gualeguaychú, a mí me ayudó mucho, más allá de que la pasé muy mal porque estaba totalmente sola, sin comunicación, sin saber nada de nada ni de nadie, me provocó ataques de pánico… Pero más allá de todo lo malo, me gusta sacar algo bueno. Sé que me ayudó mucho para conocerme a mí misma y sanar todo lo que tenía guardado".
"Tengo algo muy especial con mis sueños, les presto mucha atención porque creo mucho en lo espiritual y en lo onírico. Es más, todos estos meses profundicé en el tema porque me gusta, le presto atención porque sé que ahí está la respuesta cuando no sabés algo. Eso se ve reflejado en los sueños. Me gusta despertarme y escribirlo. Diferencio entre los sueños comunes y los que tienen un mensaje, que son la mayoría, desde nuestro interior hacia nosotros. Me siento muy conectada. Antes me pasaba, pero no les prestaba atención, nunca les preste atención, es más, no creía en nada, únicamente ahora me pasa que sueño con alguien, después lo conozco… Como me paso con vos (ríe) y también me pasa que sueño con símbolos, tengo varios libros sobre interpretación de los sueños, como el diccionario. Y lo que estudiaron Freud y Jung. Me interesa mucho el tema, leo el significado, pero creo que cada persona tiene su propia interpretación, pero un símbolo puede ser diferente para todas las personas. Por eso me gusta analizarlo todo y verlo desde una distancia, comparar y llegar a mi propia conclusión".