Antony Blinken, secretario de Estado de Estados Unidos, anunció el martes por la noche que la reunión que tenía prevista para el jueves con el ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, en Suiza quedó cancelada ante el reconocimiento de Moscú de las regiones separatistas ucranianas de Donetsk y Lugansk como estados independientes.
”Ahora que vemos que está comenzando la invasión y que Rusia ha dejado en claro su rechazo total a la diplomacia, no tiene sentido seguir adelante con esa reunión en este momento”, afirmó Blinken durante una conferencia de prensa conjunta con el ministro de Relaciones Exteriores de Ucrania, Dmytro Kuleba, en el Departamento de Estado. Blinken señaló que le envió una carta a Lavrov informándole sobre la cancelación de la reunión. ”Estados Unidos y yo personalmente seguimos comprometidos con la diplomacia si Rusia está preparada para tomar medidas demostrables para brindarle a la comunidad internacional algún grado de confianza de que se toma en serio la reducción de la tensión y la búsqueda de una solución diplomática”, agregó.
”Procederemos en coordinación con nuestros aliados y socios sobre la base de las acciones rusas y los hechos sobre el territorio”, señaló el funcionario. Blinken y Lavrov tenían previsto reunirse siempre que Rusia no invadiera más territorio de Ucrania, pero en un discurso el lunes, el presidente ruso, Vladimir Putin, reconoció a las regiones separatistas en el este de Ucrania como estados independientes.
El secretario calificó el discurso de Putin como “profundamente perturbador” y señaló que “sus declaraciones dejaron claro al mundo cómo ve a Ucrania, no como una nación soberana con derecho a la integridad territorial y la independencia, sino más bien como una creación de Rusia y, por lo tanto, subordinada a Moscú”.
Dmytro Kuleba, ministro de relaciones exteriores de Ucrania, por su parte, señaló que su país cree “firmemente” que ahora es el momento de imponer sanciones a Rusia para evitar una nueva invasión. ”El mundo debe responder con todo su poderío económico para castigar a Rusia por los crímenes que ya ha cometido y antes de los crímenes que planea cometer. Golpeen la economía de Rusia ahora y golpéenla fuerte”, señaló el diplomático ucraniano.