Nigeria demostró que es cosa seria. En realidad, siempre lo ha sido en este tipo de competencias juveniles. A pesar del exiguo 2-1 con el que había derrotado a República Dominicana en el debut, el elenco africano desplegó un gran juego frente a Italia, especialmente en el segundo tiempo, y quedó virtualmente clasificado a octavos de final del Mundial Sub-20 que se desarrolla en nuestro país.
Las poco más de cinco mil personas que se dieron cita en el Malvinas Argentinas fueron testigos de un verdadero partidazo. Porque tanto Italia como Nigeria brindaron un espectáculo de alto nivel.
Ambos elencos habían debutado con sendas victorias, frente a Brasil y República Dominicana, respectivamente. Por eso, había promesa de partidazo en el estadio Malvinas Argentinas.
El encuentro comenzó entretenido, de ida y vuelta. Italia tuvo dos situaciones en el inicio, con dos remates de Simone Pafundi que se fueron apenas desviados. La respuesta de Nigeria no se hizo esperar. De izquierda a derecha fue llevando la pelota hasta que derivó en Daga, quien sacó un remate rasante que pasó cerca del palo derecho.
A los 20′, lo tuvo Italia: el chiquitito Pafundi desbordó por derecha y tiró el centro atrás que corrigió Prati con un centro-shot y Casadei apareció por detrás para sacar un remate que pegó en el travesaño. Unos minutos antes, el propio Casadei había sacado un disparo débil desde afuera del área que devolvió el palo.
La respuesta de Nigeria no tardó en llegar. A los 28′, Eletu abrió a la derecha para Sunday, quien aprovechó que le pasó el lateral derecho y sacó un derechazo cruzado, apenas desviado. Las Águilas Verdes comenzaban a levantar vuelo. A los 30′, Daga cortó y jugó de primera, Muhammad metió un pase filtrado para Salim Lawal, quien sacó un zurdazo que tapó Desplanches en el primer palo.
A los 35′ se produjo la jugada polémica de la tarde que aportó una nota de color. El lateral derecho italiano, Mattia Zanotti mandó un centro al área y el balón pegó en el brazo extendido del lateral izquierdo nigeriano, Solomon Agbalaka. Era claro penal que el árbitro chileno Piero Maza no observó porque estaba mal ubicado y de espaldas. La acción continuó, hubo una transición ofensiva de Nigeria que cortó limpiamente Faticanti abajo y cuando se iba Casadei por la derecha, Maza cortó un avance porque el VAR lo llamó. Luego de un largo rato de observar la acción, y, si bien era penal, en la jugada previa, el propio lateral derecho italiano, Zanotti, había frenado el balón con su brazo derecho.
A través de la novedosa actualización del VAR, que se había estrenado en el Mundial de Clubes, conocida como “VAR en directo”, trata de darle claridad a la comunicación entre los árbitros y el público. Es muy simple: ante cada decisión clave tomada tras ver las imágenes del videoarbitraje, el juez principal habla por su micrófono y todos pueden escuchar los detalles y la explicación. Maza lo explicó en inglés para todo el estadio y sancionó el tiro libre para Nigeria, cuyos jugadores lo festejaron casi como un gol a favor.
A los 48′, Italia ubicó a Baldanzi tras un pase de Faticanti rompiendo líneas, el “10″ del Émpoli de la Serie A giró y sacó un zurdazo potente que el arquero Aniagboso mandó al córner. Así, con un mentiroso empate 0-0 que tuvo una dinámica de Champions League, Italia y Nigeria se fueron al descanso.
El complemento comenzó como había finalizado el primero: a todo ritmo. Sobre los 8′, en una situación de presión en la mitad de la cancha, se produjo una transición a toda velocidad de Nigeria de cuatro jugadores contra tres, el pase para Lawal fue un poco largo, Desplanches cortó abajo y el rebote le quedó a Eletu, quien definió por arriba del cuerpo del arquero, pero Ghilardi despejó de cabeza casi sobre la línea.
Los ingresos de Emmanuel, Nadi y Sarky le dieron a Nigeria más soltura de tres cuartos hacia adelante. De hecho, de una “patriada” de Emmanuel dentro del área, le ganó a Ghilardi, se levantó y metió un centro que Salim Lawal convirtió de palomita por el segundo palo. Golazo.
Italia sintió el impacto y se adelantó en el campo. Y aunque sin la fluidez de juego del domingo pasado ante Brasil, arrinconó por momentos a los nigerianos, que tuvieron en varias transiciones a toda velocidad de la “flecha” Sarky, Emmanuel, Sunday, Lawal y compañía el tercero en varias oportunidades. Pero el arquero Desplanches estuvo iluminado.
Cuando parecía que el partido se moría con el 1-0, a los 49′, desde un saque de arco de Aniagboso, Jude Sunday le ganó en velocidad a Guarino y definió de zurda sobre la salida de Desplanches: 2-0 y a otra cosa.
El público mendocino, que el domingo había apoyado a los italianos, deliró con el juego, la frescura, velocidad y desfachatez de Nigeria, que basó su triunfo en la fortaleza física y velocidad individual que caracteriza a sus jugadores para ganar cada duelo. Nigeria demostró que es serio candidato al título y ya piensa en los octavos de final.
Italia-Nigeria y todas las estadísticas:
