Balas de goma, gas lacrimógeno y partido demorado por disturbios de la barra de Godoy Cruz con la policía

Lamentable. Triste. Doloroso. De no creer. Otra vez, las lacras de los barrabravas que hacen sus negocios a costa de los protagonistas, empañaron otra hermosa tarde de fútbol.

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Al igual que había pasado frente a Insituto de Córdoba en la previa del choque del 30 de julio pasado, hubo detonaciones, gas pimienta y corridas detrás de la popular sur, pero que tuvieron su correlación adentro del campo de juego.

De hecho, a los 30 minutos del primer tiempo, el partido debió detenerse. El motivo, incidentes entre la barra del Tomba y la Policía de Mendoza. Incluso ingresó gas lacrimógeno.

Detrás de una de las tribunas del Malvinas Argentinas, los barras de Godoy Cruz se enfrentaron con los uniformados, que respondieron con gases lacrimógenos, que por acción del viento, llegaron a las gradas donde estaban la mayoría de simpatizantes del elenco mendocino, que empezaron a movilizarse por las molestias. Los movimientos en las tribunas fueron advertidas por el árbitro Leandro Rey Hilfer.

La triste imagen que seguramente recorrerá el mundo es la del bebé siendo evacuado entre los alambres de púa que separan la popular sur de la platea descubierta. La gente se asustó mucho y, hasta que abrieron la platea descubierta, bebés, niños y mujeres intentaron escapar de los efectos del gas lacrimógeno que el viento llevaba de un lado a otro.

Luego, el partido se reanudó unos pocos minutos, pero hinchas saltaron incluso al campo de juego y el árbitro debió detener el juego, que se reinició a los 38′ después de que Diego Rodríguez, Pier Barrios y Hernán López Muñoz pidieran calma a la gente.

Los Andes se comunicó con Néstor Majul, Subsecretario de Relaciones Institucionales del Ministerio de Seguridad de Mendoza, quien expresó que “se trató de un grupo de 300 personas que querían ingresar sin entradas y sin la requisa correspondiente. Por supuesto, no se les permitió el ingreso y comenzaron a lanzar proyectiles de todo tipo contra el personal policial. Como resultado de ello, hubo tres o cuatro policías lesionados, aunque sin gravedad, ya que ninguno ha sido hospitalizado”, comentó Majul, quien confirmó que hubo un detenido, que sería uno de los cabecillas o líderes de esa facción de la barra brava que intentó ingresar de prepo.