Un reciente informe de Naciones Unidas sostiene que hay un estrecho vínculo entre desigualdad económica y social, y problemas como mayores niveles de hambre, obesidad y malnutrición en América Latina y el Caribe.
"Las principales causas del alza de la malnutrición en los grupos de población especialmente vulnerables son los cambios que han sufrido los sistemas alimentarios -el ciclo de los alimentos desde su producción hasta su consumo- de la región", indica el Panorama de la Seguridad Alimentaria y Nutricional 2018 difundido por la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
El informe sostiene que el hambre afecta a 39,3 millones de personas en América Latina y el Caribe, lo que representa un 6,1 por ciento de la población regional. Un 8,4 por ciento de las mujeres en América Latina viven en inseguridad alimentaria severa, en comparación con un 6,9 por ciento de los hombres. Además, casi uno de cada cuatro adultos es obeso y el sobrepeso afecta al 7,3 por ciento de los niños y niñas menores de cinco años.
"La obesidad está creciendo descontroladamente. Cada año sumamos 3,6 millones de obesos a esta región. 250 millones de personas viven con sobrepeso, el 60 por ciento de la población regional. La situación es espantosa", afirmó el representante Regional de la FAO, Julio Berdegué.
Entre 2015 y 2016 el número de personas que pasa hambre creció en 200.000, mientras que entre 2016 y 2017 fue de 400.000.