Seguro recuerdan el caso de Justin Bieber quien, a los 12, subió sus videos versionando temas de Justin Timberlake o Chris Brown. Cuenta la leyenda que el ex ejecutivo de la industria musical, Scooter Braun, lo descubrió casualmente cuando estaba mirando algunos posibles talentos redituales en YouTube.
Si todo parecía indicar que mientras más vistas tenía tu video algún pez gordo te descubriría para llevarte a la luna, muchos artistas decidieron escribir su propio cuento, sin necesidad del "cazatalentos". Han aprendido a allanar el camino, prescindir de intermediarios, darle el pésame a la pasada industria y manejarse directamente con sus seguidores.
No es nuevo, igual. Aquí tenemos el precedente de
, que desde que grabaron “Gulp!” (el álbum debut del ‘85), en los estudios del padre de
, ya militaban por la autogestión e independencia.
Claro que internet cambió las reglas. Y una serie de super talentosos (algunos muy precoces) usaron la plataforma directamente para llegar a millones desde el living de su casa. Uno de los ejemplos más interesantes es el de Tash Sultana, la australiana multi-instumentista que a los 21 años explotó en la red con "Jungle" (2016). Camarita y grabación en vivo, Sultana hipnotizó al mundo desde su casa de Melbourne con rock, psicodelia y lo-fi más una capacidad vocal y un groove hechizante que la lanzó a giras mundiales.
Ella, sin embargo, quiere dejar claro que no es sólo un fenómeno viral. “‘Jungle’ es la canción que escribí cuando no pensaba en otra cosa, solo la escribí, y resulta que llamó la atención del mundo. Y ahora que tengo la atención del mundo, la puerta está abierta. La canción fue la llave, y ahora que grabé mi álbum, una obra que me representa como artista y música, veo Jungle como esa pieza que pega en la radio pero que no me importa más que el resto”, dijo ahora que cumplió 23.
Otros usaron el misterio. Las primeras canciones de The Weeknd (2010) aparecieron en un canal de YouTube con el nombre "xoxxxoooxo" y una imagen fija mientras sonaban los temas "What You Need", "Loft Music" y "The Morning".
Fue la forma en que Abel Makkonen Tesfaye (cantante, compositor y productor canadiense de origen etíope), decidió presentarle su trabajo al mundo. Las canciones llamaron la atención online y fueron incluidas en un blog con temas del rapero canadiense Drake, quien también levantó las cejas ante The Weeknd, los mismo que Pitchfork Media y The New York Times.
En las redes como Twitter, él sufijó su nombre con “xo”. Hay dos versiones: unos sostienen que se trata de un emoticón para beso y abrazo mientras que otros piensan que es, en cambio, una referencia al uso recreativo de éxtasis y oxicodona.
Su "Beauty Behind The Madness" se convirtió en el álbum con más reproducciones en streaming del 2015 con más de 60 millones de oyentes. Además de ser colocado ese año en el número cinco en la lista de los 50 mejores álbumes de Rolling Stone.
Otro emblemático solista nacido de YouTube es el británico
. Una de las
internacionales del momento, llena estadios por todo el mundo.
Pero antes de todo esto, era un chico anónimo y pelirrojo que escribía sus canciones y las subía desde el jardín de su casa.
Después de publicar un EP de forma independiente a principios de 2011, captó la atención de Elton John.
