El abuso y asesinato de María Trinidad Mathus Tenorio consterna a América Latina. El femicidio de la joven mexicana de 25 años trae a la memoria los femicidios de María José Coni y Marina Menegazzo, las mendocinas que fueron asesinadas durante su viaje en Montañita (Ecuador).
"Marmaid", como se hacía llamar en las redes sociales estaba de novia con una joven apodada "Ro", era música, productora y compositora y ya había grabado dos videoclips. Además, tenía al tanto de su carrera a sus seguidores a través de las redes sociales. Había estudiado la carrera de composición clásica y canto jazz.
Tenía programada para el 15 de agosto una presentación con "Monocrom" en el Rockmore Club de Música de Polanco en México, otra para el 18 en el bar Dobermann y una más para el 25 en la Biblioteca Vasconcelos.
Como era amante, del mar, las sirenas y la naturaleza decidió hacer un viaje por Costa Rica. El 26 de julio desembarcó en el aeropuerto Juan Santamaría. Las recomendaciones de otros viajeros la llevaron La poza El Salto en La Fortuna.
Allí conoció a Fernando Samalot, un puertorriqueño que estaba viajando solo. Fernando iba caminando y vio a una chica de pelo largo sola en el río contemplando el paisaje, no lo dudó un segundo y le sacó una foto sin pensar que esa sería el último retrato de la mexicana.
Después se encontró con la chica le comentó de la foto y se la pasó. María decidió quedarse con él y otro jóvenes viajeros a compartir el día.
Fernando le comentó a la prensa local, que después de que salieron del río hubo una creciente y todos comentaron que se habían salvado de milagro. "La muerte la seguía", dijo el puertorriqueño.
María y Fernando pasaron un día más en las termas de la zona con Niky Moorhouse, la joven inglesa que unos días más tarde estaría presente durante el ataque en la playa, y otros turistas más. Después de la excursión a las aguas termales el grupo se separó: María y Niky se fueron a las playas de Cóbano y el viaje de Fernando llegaba a su fin debía regresar a su país.
La madrugada del domingo 5 de agosto, María y Niky estaban paseando por la playa El Carmen, en la localidad de Santa Teresa de Cóbano, provincia de Puntarenas (Pacífico). Dos hombres se acercaron, les tocaron sus partes íntimas y las obligaron a entrar al mar.
Ambas intentaron liberarse y forcejearon con los atacantes, la inglesa alcanzó a zafar y salió corriendo pero la mexicana no pudo escaparse.
Niky fue en busca de ayuda al hotel donde se estaban hospedando. Los dueños del alojamiento llamaron a la policía quienes montaron un operativo en la zona. Unas horas más tarde encontraron el cuerpo sin vida en la playa y detuvieron a un sospechoso que fue casi linchado por los vecinos. Después detuvieron al segundo sospechoso.
Aunque algunas versiones dicen que intentaron asaltarlas, las declaraciones de la turista inglesa dicen que también las abusaron.