Una nueva imagen de Fernando Pastorizzo, el joven que fue asesinado el 29 de diciembre pasado en Entre Ríos, podría agravar la situación penal de su ex novia Nahir Galarza, en el juicio que comenzó esta semana. A Pastorizzo se lo observa con un ojo hinchado, producto de una golpiza que sufrió días antes de morir.
La historia fue relatada ayer en el tribunal de Gualeguaychú por amigos de Fernando, cuya madre estaba presente al borde de las lágrimas. Juan Cabrera, amigo de Fernando y también primo de Nahir, presentó como prueba la imagen que había sido enviada por WhatsApp y que data de la supuesta pelea del 26 de diciembre, tres días antes del crimen.
Al parecer, Fernando Pastorizzo fue a la casa de su amigo y le confesó que había sufrido una golpiza por parte de su novia y de su amiga. En la foto presentada como prueba, que en aquel momento había sido tomada al azar, se aprecia al joven con el ojo izquierdo inflamado a raíz de la pelea.
"Lo primero que pensé fue que unos tipos le habían pegado para robarle. Enojado, llamé a Nahir, me contestó riéndose y me dijo que, si Fernando contaba lo que había pasado, ella se iba a hacer la víctima y que diría que él le pegó", reveló el muchacho durante la última audiencia del juicio.
Sin embargo, uno de los abogados de Galarza desestimó la versión del chico y lo acusó de falso testimonio, ya que dudó acerca de por qué Fernando no se defendió ante los ataques, informó diario Clarín.
Los relatos de otros seis amigos de Pastorizzo también apuntaron a la chica de 19 años acusada de homicidio y que arriesga hasta la pena de prisión perpetua. “Ella lo agarraba del brazo y se lo llevaba, como si se lo apropiara. Una vez, en un boliche, la vi volcarle un vaso de champagne en la cabeza”, dijo Juan Jara, compañero de la secundaria del fallecido.
Más allá de los testimonios de los amigos de Pastorizzo, este jueves declarará Sol Martínez, una amiga de Nahir Galarza que podría cambiar el rumbo del juicio.
Según trascendió, la chica negará la paliza y dirá que ella fue quien le pegó una trompada en el ojo al joven, con el fin de despegar a Galarza de la pelea. Se trata de algunos recursos que tiene la defensa para demostrar que Nahir era la víctima y Fernando el victimario.