La Justicia le otorgó el beneficio de la prisión domiciliaria a la joven de 21 años acusada de haber asesinado de una puñalada en el cuello a su marido el lunes pasado en Guaymallén. La imputada tiene una hija de 1 año y medio a quien debe cuidar.
El hecho que se le imputa a Marisol Silva (21) ocurrió cerca de las 2 de la madrugada del último lunes en una vivienda ubicada en la calle Valdivia al 500. Allí estaban José Luis Baltierre, de 23 años, su mujer y una amiga de ella. En la casa también estaba la pequeña de un año y medio, hija de la pareja.
La Policía fue alertada una vez consumado el hecho, según se informó. Cuando efectivos de la Unidad Investigativa de Guaymallén llegaron al escenario del crimen, interrogaron a la joven de 21 años amiga de la dueña de casa.
Según datos aportados por la testigo, mientras estaban sentados en la mesa, la pareja comenzó una acalorada discusión. En la pelea, y de acuerdo a lo aportado por la chica, Baltierre golpeó a su mujer en el rostro. Eso detonó la reacción de la joven, quien agarró un cuchillo de la cocina e hirió al sujeto en el cuello.
Según detallaron fuentes cercanas a la investigación, el joven presentaba una herida por arma blanca en el cuello a la altura de la arteria aorta, lo que le habría provocado la muerte en cuestión de minutos.
La causa está en manos del fiscal de Homicidios, Gustavo Pirrello, quien hoy resolvió, por un pedido de la defensa, hacer lugar a la prisión domiciliaria de la imputada, informaron fuentes judiciales.
La decisión del fiscal se basó en que la imputada tiene a cargo el cuidado de una hija de un año y medio.
Pirrello mantuvo la carátula con la que imputó a Silva horas después del sangriento hecho - homicidio agravado por la relación de pareja- mientras espera contar con los resultados de las pericias sobre el cuerpo de la victima, sobre la imputada y de las pericias psicológicas.