Un chofer del grupo 5 se convirtió en el héroe de una familia luego de salvar a un pequeño pasajero que viajaba a bordo del colectivo que manejaba. Juan Ortega no dudó en parar el coche y auxiliar a un niño que estaba inconsciente.
Todo ocurrió el pasado lunes, pero se conoció en el feriado de ayer. Cerca de las 17.30, el interno 99 del grupo 5 transitaba por calle San Juan en uno de los recorridos habituales que hace el 73 cuando, al doblar por calle Alem, los gritos desesperados de una madre alarmaron a todos los pasajeros.
La mujer sostenía a un niño de entre 6 y 7 años que parecía estar inconsciente. Juan Ortega, el chofer, continuó manejando hasta calle Rioja, detuvo el coche y se acercó a hasta donde estaba la madre con el pequeño. Luego reaccionó de una manera que sorprendió a todos los pasajeros y así se convirtió en un héroe que hoy deja de ser anónimo.
"Tenía los ojos para atrás, la boca morada y la lengua para atrás, la madre le gritaba pero no lo podía despertar. Lo agarré, lo puse boca abajo porque tenía miedo de que se ahogara y lo llevé corriendo hasta una sede de la clínica Asistir", explicó Ortega en comunicación con Los Andes, visiblemente aún conmocionado por lo que le tocó vivir.
“Dejé el colectivo con la gente arriba, un hombre se quedó cuidando mis cosas mientras llevaba al nene. La madre corría atrás mío”, agregó. El joven llegó a la clínica con el pequeño en brazos y se lo entregó a un médico de lugar. Recibió asistencia inmediata.
"Cuando me fui ya estaba bien", contó Juan.
El conductor, de 27 años, se emocionó al recordar los dramáticos momentos que vivió esa tarde. "Se me cruzaba mi hijo, me puse a llorar en la clínica". Juan es padre de Ignacio de 7 años y Luz de 3.
“Llegue al control y llamé a mi mujer, tenía un descanso de 15 minutos y aproveché para relajarme y contarle lo que había pasado”, continuó.
Luego de salvar al niño - a quien su madre le gritaba desesperada en plena crisis "Joel, despertate" - el heroico chofer no volvió a tener noticias de él. "La mujer me dio su número pero no he podido comunicarme, yo quería hablar con ella ese mismo día pero no me puedo comunicar", dijo.
Juan trabaja hace solo cuatro meses como chofer de colectivo. El joven antes manejaba camiones y según contaron habituales pasajeros en las redes sociales, se destaca por su humildad y honestidad. "Las semana pasada se olvidaron un celular y lo devolví. La señora vino al control y me dio un presente", recordó.
Respecto de la imagen negativa que algunas personas tiene de los choferes de colectivos Ortega asegura que “hay de todo” y que él siempre está tratando de colaborar con los pasajeros.
"Hay gente muy maleducada, hay gente que saluda y gente que no, hay gente que ni te dirige la mirada, pero no toda la gente es igual y no todos los choferes somos iguales", concluyó.