Un incendio forestal arrasó con 20 mil hectáreas en General Alvear y mató 400 vacas

Productores y la Cámara de Comercio del departamento piden que se permitan las quemas controladas para quitar vegetación seca.

Incendios forestales en General Alvear avanzaron sobre 20 mil hectáreas de campos ganaderos y causaron la muerte de unas 400 vacas. Gentileza
Incendios forestales en General Alvear avanzaron sobre 20 mil hectáreas de campos ganaderos y causaron la muerte de unas 400 vacas. Gentileza

La esperada lluvia en el sur mendocino, que acumuló unos 70 milímetros el viernes pasado, vino precedida por una tormenta eléctrica, que causó tres focos de incendio en el sur de General Alvear, alimentados por la vegetación seca. El agua apagó las llamas, pero antes de que esto sucediera, arrasaron con más de 20 mil hectáreas, en 7 campos ganaderos, y murieron unas 400 vacas y terneros.

Fredi Gil, quien tiene dos campos contiguos, comentó que el fuego, cuando cambió la dirección del viento, afectó una franja de 20 kilómetros de vegetación seca y fue pasando de una propiedad a la otra. En su caso, le quemó unas 4 mil hectáreas en una y 3 mil en la siguiente. Horas después, encontraron 22 vaquillonas muertas, que las había acorralado el fuego, pero también mucha fauna nativa, como avestruces y zorros. Y a algunos animales los tuvieron que sacrificar, porque habían quedado ciegos.

Asimismo, comentó que el daño monetario más complejo fue el de la quema de alambrados. De hecho, mientras hablaba con Los Andes estaba en viaje a Río Negro, porque un amigo le había conseguido alambre en esa provincia, ya que hay faltantes. Gil sufrió daños en unos 15 kilómetros de cierre perimetral y tenía que empezar a colocar nuevos postes lo antes posible, porque los animales estaban empezando a cruzarse a los campos vecinos.

El kilómetro de alambrado, detalló, tiene un costo de alrededor de $600 mil; de los que el 30% corresponde a mano de obra y 70% a materiales, como los postes, las varillas y el alambre. A esto, además, hay que sumar la logística y el costo del combustible en su caso, que tuvo que viajar a Río Negro para comprar elementos.

El productor comentó que hace 25 años tiene el campo y no había visto algo parecido, y que incluso hubo riesgo de que quedaran atrapadas personas, porque el viento cambió de dirección y ganó intensidad, por lo que empezó a avanzar rápidamente. Pero también planteó que hace cuatro años que están intentando organizarse para hacer quemas programadas y no está permitido. Esto, pese a que, por el tipo de vegetación en esa zona, podrían encender franjas angostas, en momentos tranquilos, sin viento.

El presidente de la Específica de Ganadería, de la Cámara de Comercio, Industria, Agricultura y Ganadería de General Alvear, Ramiro Labay, explicó que hay una ley, que se encuentra reglamentada y permite las quemas controladas, con las que se puede incinerar hasta un 10% de la superficie total de un campo, de manera estratégica, para evitar los incendios descontrolados. Esto, porque cuando llega el verano y hay mucha vegetación, un rayo puede causar llamas. En cambio, al quemar de modo controlado, se reduce ese material combustible y aumenta la productividad de los campos, ya que en el lugar donde estaba la planta seca, crece otra nueva y da alimento a las vacas.

Estas quemas, detalló, se realizan en invierno, cuando hay más humedad en el ambiente, y, además, se debe tener al menos seis metros de picada en el perímetro, para evitar que las llamas se descontrolen. Labay indicó que la ley se iba a modificar para agilizar su aplicación, pero este cambio se ha ido postergando y, entre tanto, se generan nuevos incendios.

Sobre el último, explicó que la tormenta eléctrica generó tres focos diferentes, que avanzaron sobre siete campos, con un total de unas 20 mil hectáreas, muchos daños materiales y mortandad de animales (unas 400 cabezas de ganado). Y sumó que, si no hubiera llovido al día siguiente, podría haber sido catastrófico.

Asimismo, comentó que hay un proyecto para el fortalecimiento de las bases de lucha contra los incendios forestales, que implica la provisión de maquinaria adiocional para realizar la tarea y estaría avanzado, pero aún no llegan las inversiones desde Nación.

En General Alvear hay un base del Plan Provincial de Manejo del Fuego, que cuenta con camionetas y camiones hidrantes, además de una motoniveladora que el municipio tramitó en Nación, y que, desde 2018, se encarga de realizar picadas. Además, hay otra base en Monte Comán (San Rafael), y ambas trabajan de modo colaborativo cuando se trata de incendios de magnitud.

Tenemos algo para ofrecerte

Con tu suscripción navegás sin límites, accedés a contenidos exclusivos y mucho más. ¡También podés sumar Los Andes Pass para ahorrar en cientos de comercios!

VER PROMOS DE SUSCRIPCIÓN

COMPARTIR NOTA