Tecnologías que impulsan la producción de ajo

La producción de ajo sigue creciendo en la provincia de Mendoza y se estima que la superficie sembrada en la última campaña alcanzó las 11.323 hectáreas, con un volumen estimado en 139.806 toneladas, un 9% más que el ciclo pasado. Según los datos del Instituto de Desarrollo Rural, éste sería el mejor de los últimos ocho ciclos productivos.

De la mano de ese crecimiento, se ve una evolución en los aspectos técnicos y una mayor permeabilidad de los productores a las recomendaciones ajustadas a las necesidades de cada finca.

Horacio Rodríguez es ingeniero agrónomo y asesor en todo el Valle de Uco. En esta época del año recorre las fincas y recopila historias de éxito que hablan del adecuado uso de las tecnologías.

Una de esas historias es la de Cristian Méndez, un ex productor de peras y manzanas que hace siete años se volcó al ajo en busca de rentabilidad. En esta campaña sembró 7 hectáreas de ajo colorado en su finca de Colonia Las Rosas, departamento de Tunuyán. “Producir ajo requiere de muchos cuidados”, dice. “Un solo error en la elección del herbicida o en el momento de aplicación de un fertilizante te puede costar la cosecha”, acota.

En la finca de Méndez se ven los resultados de un manejo estratégico y apoyado en las soluciones de UPL. Para el inicio del ciclo, trataron las semillas con Vitavax Flo, el fungicida para tratamiento de semilla con efecto estimulante de la germinación, y apostaron a Raizal, un fertilizante arrancador de cultivo con un buen contenido de fósforo y promotores de crecimiento que inducen un buen arranque y desarrollo de las raíces.

“El ciclo pasado, cuando llegué a esta finca, uno de los principales problemas era no tener una emergencia pareja del cultivo, y buscamos un producto que nos diera una solución a eso. Por eso elegimos Raizal para promover raíces y los resultados nos dan la razón: el enraizamiento fue mucho más rápido y la emergencia mucho más pareja. El 95% del ajo salió en los primeros quince días, algo que es muy raro en esta producción”, explica Rodríguez.

Más adelante, a unos 30 días de la emergencia, aplicaron Emerge, un fungicida sistémico de UPL para el control de enfermedades foliares en el cultivo. “Se eligió este producto frente a lo que se encuentra en el mercado, dado que la combinación de los principios activos ciproconazole y azoxistrobina nos brinda una eficaz y rápida acción frente a las enfermedades que se presentan en el valle para este cultivo”, amplía el asesor.

Por su parte, desde la zona de El Topón, también en Tunuyán, Emiliano Guevara reconoce que viene de familia ganadera pero hace unos seis años se volcó al ajo que no solo produce sino también comercializa. “Es una buena zona para esta producción, muy fría, con un poco de salitre pero con buena humedad”, explica. Ahí se producen principalmente dos variedades de ajo: chino y colorado.

Guevara también apostó al combo Vitavax Flo+ Raizal + Emerge y los resultados fueron superadores comparados con el ciclo anterior. Sus cuatro hectáreas de ajo sembradas entre el 15 y el 20 de marzo esperan ahora su recta final: el ajo chino se cosechará entre el 5 y el 20 de noviembre -según las condiciones climáticas permitan- y el colorado unos 30 días más tarde. Una vez hecho ese trabajo, desde la finca de El Topón, el ajo se corta, se pela, se separa en cajas de 10 kg y se exporta a Brasil.

Ambos productores coinciden en que las nuevas demandas globales y locales para la producción de alimentos los desafían a trabajar en red con una mirada clara hacia la sustentabilidad. “La pandemia, en definitiva, nos hizo dedicar más tiempo a capacitarnos, a escucharnos en conferencias virtuales, a intercambiar con otros productores, técnicos o empresas, y proyectar un desarrollo mucho más sustentable de nuestros cultivos y de la horticultura en el Valle de Uco en general”, concluye Rodríguez.

Acerca de UPL

UPL es una compañía de origen indio y una de las 5 principales empresas de soluciones agrícolas del mundo. Con presencia en más de 130 países y acceso al 90 por ciento del mercado mundial de alimentos, UPL ofrece un portafolio integrado de soluciones agrícolas tanto patentadas como post-patente para diversos cultivos extensivos y especialidades que incluyen soluciones biológicas, de protección de cultivos, tratamiento de semillas y postcosecha, cubriendo toda la cadena de valor de los cultivos.

Con su programa Pronutiva, la compañía integra biosoluciones y productos de protección promoviendo sinergias que resultan en un mayor rendimiento, calidad y ganancias para el productor. Más info en https://www.upl-ltd.com/ar