En las tribunas, los hinchas disfrutaron del superclásico mendocino

Tiene otro sabor. Es especial. El superclásico mendocino entre la Lepra y el Lobo, se vive de otra manera. Se siente diferente. Es que desde que se fundó la Liga Mendocina allá por 1921, los duelos entre Pitucos y Azules fueron apasionantes. Paralizaban la provincia.

Hoy, nuevamente en la misma categoría, los vecinos se necesitan. Se quieren enfrentar, por el honor y por la cargada post partido con el amigo, compañero de laburo, familiar etc. Folclore deportivo en su máxima expresión. Y  por más que en esta oportunidad, el derby fue amistoso, el hincha respondió con creces.

Estuvo a la altura de las circunstancias y en el estadio Malvinas Argentinas se vivió una verdadera fiesta. Quedó demostrado que el hincha común, el que ama su camiseta, sigue con vida. Tiene su lugar. La familia volvió a la cancha y se vivió una jornada en paz. En los alrededores del estadio, existió una que otra corrida. Pero, esos hinchas, son los que ya no tienen lugar. Tolerancia cero. Antes, la gente los aplaudía y en muchos casos, algunos se convertían en referentes. Todo cambió.  Hoy, cambiaron aplausos por silbidos. Reproches. La gente común los ignora, repudia y casi ni los identifica. Sin dudas, un paso gigante. La familia tiene que volver al fútbol.

Absurdo: durante las primeras horas del día de ayer, en en el nudo vial de Costanera y Acceso Este, hinchas identificados con los colores de Independiente Rivadavia, colgaron  dos bolsas de residuos con caretas de lobo y el número 33 grande en el pecho de cada uno. Absurdo por donde se lo mire o analice. Inmediatamente, las imágenes se filtraron por las redes sociales. De inmediato, la Policía de Mendoza, actuó rápidamente y retiró esta broma desafortunada.

Falsificaron entradas: lamentablemente, el Presidente de la Liga Mendocina, Carlos Suraci, confirmó que se falsificaron entradas y que las misma fueron comercializadas en los alrededores del estadio.

Preliminar de lujo: antes del  gran encuentro entre Independiente y Gimnasia por el Torneo Vendimia, en el juego preliminar, se midieron las categoría 2007 de cada club. Todos los jugadores fueron aplaudidos por el público presente. Ganó la Leprita 1-0.

Para imitar: el ingreso al campo de juego fue un espectáculo único. Las tribunas explotaban de pasión. Los jugadores del Lobo ingresaron al campo de juego con globos azules y de la mano con chicos con la camiseta de Independiente. Por el lado de la Lepra, los jugadores llevaron globos blanco y negros y fueron acompañados por chicos con la camiseta Mensana. Ojalá se repita. Fantástico.

La lesión de Asenjo: el delantero Azul, sólo jugó 15 minutos. Tras recibir un fuerte golpe, tuvo que ser reemplazado por el Torito Lucero. Le costaba caminar cuando abandonó el campo. De inmediato, se lo llevaron al vestuario. Luego, en un auto particular lo trasladaron hasta una clínica cercana.

Cuando se hablaba de fractura de tobillo, llegó la voz oficial: esguince de grado 3. Casi un mes de recuperación. Llegaría con lo justo para el debut de la Lepra el 19 de agosto.