En agosto, la suba en los alimentos rondó el 6,4% en promedio

Aunque la inflación de julio fue la más elevada de los últimos 20 años, la inercia ha provocado que el ritmo de aumento de precios se haya mantenido arriba en agosto. Y, de hecho, los incrementos en alimentos son de los que más han impactado en que el IPC calculado por consultoras privadas esté por encima del 6% para el mes que terminó.

“La inflación en el mes de agosto se ubica en el podio de las tres más elevadas del año, con un promedio del 6,2 %, arrastrada por Salud, Transporte y Esparcimiento. Para el caso de Alimentos y Bebidas, la suba promedio es del 6,4 %, con muchas categorías aún en el orden de los dos dígitos de variación intermensual de precios y una de tres dígitos interanual en muchos productos de la canasta básica”, explicó Damián Di Pace, director de Focus Market. La consultora realiza el seguimiento de los precios de 70 artículos, que engloban a 682 productos de diferentes marcas y presentaciones, a los efectos de evaluar la evolución de los valores de venta.

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En el top 10 de las categorías de productos que más aumentaron en agosto, en comparación con julio, se encuentran: azúcar (30%), rollo de cocina (21,4%), puré (19%), huevos (18,8%), enlatados de pescado (18,4%), papel higiénico (17,2%), premezclas (15,2%), desodorante (14,1%), productos para el pelo (13,7%) y crema de leche (13,6%). Por otra parte, desde la entidad privada resaltan que sólo una categoría registró una baja: caldos, del 0,3%.

En tanto, los 10 que tuvieron el incremento interanual -agosto 2022 versus 2021- más fuerte fueron: azúcar (193,8%), rollo de cocina (153,6%), huevos (145,9%), papel higiénico (145,5%), pañales (136,3%), cereales (135,6%), mayonesa (134,8%), fernet (129,3%), jabón de tocador (125,1%) y premezclas (122,4%).

“Con la llegada de Sergio Massa, se intenta corregir los datos del desequilibrio fiscal y monetario por el que transita la economía argentina. En el mes de julio, el gasto primario cayó un 50% y un 5% en términos reales. Los anuncios sobre aumento de tarifas públicas no alcanzan para disminuir el déficit fiscal. Los recortes en obras públicas, salud y educación colaboran y, por otra parte, la propia inercia inflacionaria licúa otra parte del gasto. Las demandas sociales y del sector público en materia de ingresos y salarios hacia fin de año pueden ser un condicionante si se relajan las condiciones fiscales,” analizó Di Pace.

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Precios en alza, compras en baja

Por su parte, José Vargas, de la consultora mendocina Evaluecon, indicó que, después de la primera semana de agosto, cuando los alimentos tuvieron incrementos fuertes, producto de la inercia de las subas de julio, el resto del mes la situación fue bastante dispar. Así, indicó que hay algunos productos que casi han mantenido su precio, pero que el 75% del rubro siguió aumentando, en algunos casos por una cuestión estacional y, en otros, porque muchos proveedores están trabajando con lo que se conoce como “precio abierto”. Esto es, sin detallar el precio de reposición, lo que generó que el sector minorista acomodara los valores al alza, para no quedarse fuera del mercado y sostener sus niveles de rentabilidad.

Por su parte, Rubén David, del mayorista Oscar David, comentó que las subidas más fuertes se han dado en productos importados, como latas de ananá y palmitos, y chocolates que no se elaboran en el país -aunque el cacao se trae de afuera, hay fábricas de chocolate locales-, y sumó que no sabe si estos van a ser los precios definitivos o si responden a que las trabas para importar se reforzaron en el último tiempo.

En cuanto al resto de los artículos, señaló que los aumentos han sido de alrededor del 4% al 5% en promedio durante el mes y que incluso hubo empresas que habían pasado listas con subas del 6% y luego retrocedieron al 3%, u optaron por esperar a ver cómo evoluciona la situación en setiembre. Y añadió que algunos de esos ajustes los trasladaron al cliente, pero en otros casos, que tenían stock, lo absorbieron.

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David manifestó que las ventas están muy tranquilas y lo atribuyó en parte a la caída en la capacidad de compra, a que no se han producido nuevas subas desmedidas y a que, cuando se produjeron en pocos días la renuncia de Matías Guzmán y luego el desplazamiento de su sucesora, Silvina Batakis, para que llegara Sergio Massa, la gente salió a tratar de tener las alacenas y la heladera llenas, por si se disparaban los precios o el dólar, y ahora no tienen tanta necesidad de comprar.

Omar Carrasco, titular de la Unión Frutihortícola Argentina, indicó que, en general, luego de que varios precios treparan en los primeros días de agosto, en general se han mantenido, con ciertas subas en casos puntuales, y sin variaciones en la última semana.

En cuanto al pan, el sector está en una negociación con la Secretaría de Comercio de Nación, ya que el subsidio a los molinos, para asegurar que llegara a las panaderías materia prima a un precio más accesible, no funcionó como se había previsto y la harina subsidiada llegó tarde y en poca cantidad. Ahora, el gobierno nacional propone que los panaderos compren al valor real y luego reciban un reintegro. Sin embargo, hay dudas de que esta alternativa resulte exitosa y no saben por cuánto tiempo podrán mantener los valores actuales.

Otra consultora nacional, LCG, plantea que, en agosto, la inflación fue del 6,4% en promedio y que el 25% de los alimentos subieron en las últimas cuatro semanas, lo que significa que todos los productos de la canasta habrían registrado un aumento el mes pasado.

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Así como la consultora Focus Market ha calculado una suba de precios al consumidor del 6,2 % en promedio para todo el país en agosto, la mendocina Evaluecon la sitúa en el 6,97% para la provincia. José Vargas señala que entre los rubros que más subieron el mes pasado están alimentos, atención médica y gastos para la salud, y alquileres.

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Por otra parte, adelantó que es de esperar que esta suba de precios se mantenga en setiembre, aunque tal vez el ritmo disminuya, pero que empezarán a jugar otros factores, fundamentalmente, el aumento en las tarifas de servicios públicos y las negociaciones salariales, que se han dado en la mayoría de los sectores y que van a tener su incidencia en estos rubros.

Además, indicó que se debe seguir de cerca lo que suceda con la evolución del tipo de cambio oficial, ya que está teniendo una devaluación diaria y la mayoría de los insumos están dolarizados, por lo que su variación podría tener un impacto importante.