El costo de la crianza de un hijo de 6 a 12 años alcanzó, en mayo, los $407.062, lo que significa un aumento de 247% con respecto a los $117.387 que costaba la misma canasta de bienes, servicios y cuidado para niños y adolescentes de esa franja de edad en el mismo mes del año pasado. Aunque el crecimiento ha sido importante, la evolución es de casi 30 puntos porcentuales menos que la inflación interanual, que alcanzó el 276,4%.
El Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) elabora la valorización de la canasta de crianza de la primera infancia, la niñez y la adolescencia -de los 0 a 12 años-, que incluye tanto el costo mensual para adquirir los bienes y servicios para el desarrollo de bebés, niños y adolescentes, como el costo de cuidado, que se calcula a partir de asignarle un valor al tiempo requerido para esa actividad.
Asimismo, la estimación se realiza para cuatro tramos de edad. Criar a un niño menor de un año demandó, en mayo, $327.350, de los que $96.431 corresponden a bienes y servicios y $230.918 a cuidado. En el mismo mes de 2023, el total era de 98.339; es decir, aumentó 233% en el último año.
Los bienes y servicios se calculan en función de la CBT o Canasta Básica Total, por lo que contemplan los alimentos necesarios para cubrir los requerimientos energéticos mínimos y también vestimenta, transporte, educación, salud, vivienda, etcétera. Mientras que para determinar el costo de cuidado se toma en consideración la cantidad de horas mensuales requeridas para cada tramo de edad y el valor de la hora, según lo define el régimen para el personal de casas particulares.
Para los niños de 1 a 3 años, el monto mensual necesario para la crianza ascendió a $388.422, $124.515 para bienes y servicios, y $263.907 para cuidado. En mayo de 2023 se habían necesitado $116.050, con lo que el aumento en este tramo fue de 235%.
Cuando los pequeños tienen de 4 a 5 años, la canasta total llegó a $323.527 -247% más que los $93.204 del mismo mes del año pasado- y, en este rango de edad, los montos de bienes y servicios, y de cuidado se equiparan bastante, ya que son de $158.585 y $164.942, respectivamente.
En el caso de los niños y adolescentes de 6 a 12 años, del valor total de $407.062 que alcanzó la canasta de crianza, $196.726 correspondieron a bienes y servicios, y $210.336 a cuidado.
En el último año, el costo de alimentación y otros bienes y servicios no alimentarios se incrementó un 290%, es decir, por encima de la variación del Índice de Precios al Consumidor, mientras las horas de cuidado tuvieron una evolución bastante por debajo, ya que aumentaron un 213%.
Pobreza infantil
Cuando se considera que sólo monto mensual para alimentación y la adquisición de bienes y servicios complementarios -considerando que algún familiar se haga cargo del cuidado-, oscila entre los $96.431 de los bebés menores de un año y los $196.726 de los niños y adolescentes de entre 6 y 12 años, se entiende que los datos de pobreza infantil sean tan altos en el país.
Es que si bien la Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables (Ripte) fue de $ 819.501,72 en abril, se trata, precisamente, de un promedio de los sueldos de diversos gremios. En cambio, el Salario Mínimo Vital y Móvil fue fijado en $234.315,12 en mayo.
Un informe del Observatorio de la Deuda Social Argentina, de la Universidad Católica Argentina (UCA), reveló que, en las áreas urbanas relevadas en el país, el 24,7% de las personas y el 32,2% de los niños y adolescentes se encuentran en una situación de inseguridad alimentaria. Esto implica que se alimentan, pero con opciones más baratas y no las más nutritivas, lo que puede llevar a malnutrición y obesidad (por optar comida con muchas calorías, grasas saturadas, azúcar y sal).
Aún más, tienen inseguridad alimentaria severa el 10,9% de las personas y el 13,9% de los niños y adolescentes argentinos, lo que significa que han pasado un día o más sin comer, porque no han podido acceder a alimentos.
Dificultades
Pero aún entre quienes no se encuentran en una situación tan compleja, la pérdida de poder adquisitivo de los salarios frente a la inflación en últimos meses -que recién empieza a querer recuperarse-, ha provocado que muchas familias deban apelar a distintas estrategias para poder sobrellevar los gastos que implica la crianza de los hijos y adolescentes.
Es que el valor de la Canasta Básica Total para un hogar de cuatro integrantes (un varón de 35, una mujer de 31, una niña de 8 y un niño de 5) ascendió a $851.351 en mayo. Este monto supera el salario promedio del Ripte y es más de tres veces superior al salario mínimo vital y móvil.
Para tener algunos valores de referencia, la lata de 800 gramos de leche en polvo infantil Sancor bebé etapa 1 tiene un precio de $31.109 y la Nutrilon etapa 2, por 1,2 kilos, de $39.225 en el supermercado. Mientras que un paquete de 48 pañales Babysec talle M cuestan $9.695 y uno de la marca Pampers Babysan, por 72 unidades, $34.359.