En Mendoza la comunidad china no está demasiado arraigada. Así, hay supermercados, comercios de indumentaria y bazares que siempre han existido con una tendencia al alza en los últimos tiempos con la apertura del gigante Yafanni en Las Heras y 9 de julio. De manera firme y sin pausa, los comerciantes locales ven que aumenta la oferta de productos importados en general y de comercios chinos en sus distintas formas en particular. Mientras por un lado celebran que los mendocinos tengan más oferta para hacer sus compras, por el otro recuerdan que los bajos precios de los importados y el modo en que algunos buscan eludir las normas, convierte a algunos de estos negocios en competencia desleal desde distintos puntos de vista.
En este sentido, Santiago Laugero, presidente de la Federación Económica de Mendoza (FEM), expresó que el incremento de productos de afuera y de China con precios competitivos es una suerte de reflejo de época. El empresario –que viene del área de la construcción- relató que esto se ve también en dicho sector en donde crece el interés por adquirir productos chinos, incluso hasta los finales como pueden ser viviendas prefabricadas para terminar de montar. Con relación a esto, el dirigente de la FEM observó que con relación a los bazares en especial, la competencia con la industria nacional es baja y –en este punto- es interesante que el público cuente con mayor cantidad de alternativas.
Bazares chinos en Mendoza
Crecieron los negocios y bazares chinos en Mendoza y aumentaron sus ventas.
Los Andes / Ramiro Gómez
Sin embargo, aclaró que se trata por el momento de una ganancia relativa debido a la desigualdad que puede surgir tanto por parte de estos comercios como de otros que se manejan al margen de la norma de un modo u otro. “Desde la FEM y la CAME abogamos por equilibrar las reglas de juego y nos preocupa la competencia desleal”, subrayó Laugero. Desde estas y otras entidades como la Unión Industrial Argentina (UIA) promueven y apoyan desde hace tiempo la llamada Ley Pyme.
Aunque el Gobierno nacional anunció el año pasado que presentaría la Ley de Promoción de Inversiones y Empleo para pequeñas, medianas y grandes empresas; todavía no ha habido avances concretos. Desde distintos sectores ven cómo la apertura de las importaciones se acelera sin una política complementaria de apoyo a la industria nacional y rebaja de impuestos para poder equilibrar la cancha. En este sentido, Adolfo Trípodi –comerciante histórico y miembro de la FEM- observó que un concepto clave es la cadena de valor.
“Para entender por qué una camisa vale lo que vale, hay que seguir el camino que hizo ese producto y ahí ves cómo las ineficiencias hacen que determinado bien sea más caro en un lugar que otro”, subrayó Trípodi. Agregó que la competitividad es un problema sistémico y cuando una cadena de valor compite con otra hay que mirar todo lo que allí entra como el sistema legal, impositivo, laboral que hace que ese precio se forma. Con relación a la competencia entre productos chinos e importados en general, Trípodi confirmó que los comerciantes minoristas ven de manera cotidiana este fenómeno que se incrementa día a día y que “puede ser peligroso para la Argentina que ya ha vivido situaciones similares”.
Bazares chinos en Mendoza
Crecieron los negocios y bazares chinos en Mendoza y aumentaron sus ventas.
Los Andes / Ramiro Gómez
En coincidencia, Adrián Alín, presidente de la Cámara Empresaria de Comercio, Turismo, Industria y Servicios de Mendoza (Cecitys), advirtió sobre las dificultades que vienen de la mano de la baja de aranceles y apertura general. Sin embargo, Alín no olvidó mencionar que el flagelo de las ventas en Chile y la dificultad para los locales de competir con precios casi imposibles en las condiciones actuales de siquiera equiparar los valores que se encuentran afuera. A la manera inversa, el importado afecta fuertemente a los nacionales sin periodos de transición a la vista.
Consumo y bolsillos flacos
Más allá de los problemas de la competitividad que ponen en riesgo a distintos sectores de la economía real, la principal dificultad viene de la mano del bajo consumo. Es que si el poder adquisitivo de la mayoría fuera mejor, tal vez el impacto de los importados no sería tal o sería menor. Santiago Laugero expresó que si bien los últimos relevamientos de ventas minoristas que realiza CAME han sido positivos (la última medición de febrero subió 24% interanual) destacó que 2024 fue un año “muy muy malo”. De este modo, la mejora debe incluir dicho análisis para ser realista por lo que el comercio continúa en una situación muy delicada y con un estancamiento generalizado.
Bazares chinos en Mendoza
Crecieron los negocios y bazares chinos en Mendoza y aumentaron sus ventas.
Los Andes / Ramiro Gómez
En línea, Trípodi comentó que la disminución de consumo ha sido atemperada en parte por la posibilidad de comprar en cuotas ya que es una opción que crece en líneas generales. Aunque el comerciante recomendó tener en cuenta las tasas de interés ya que salvo promociones específicas o Plan Cuota Simple, son mayores que la inflación. Así, las pocas ventas que se perciben vienen apalancadas por las tarjetas de crédito y, en palabras de Laugero, por la competencia entre los bancos con las billeteras virtuales. Es que en especial los descuentos y devoluciones mensuales que se ofrecen cada vez más incentivan algunas compras que ahora se diversifican en distintos comercios y según el día, el banco o la billetera.
En coincidencia, Adrián Alín observó que si bien las cuotas y descuentos funcionan como un aliciente para el consumo, lo cierto es que a muchos comercios chicos “la soga les está llegando al cuello”. Es que por más que las personas puedan aprovechar un beneficio, lo cierto es que el poder adquisitivo no se termina de recuperar y al no “no haber plata” en la calle, todos se ven perjudicados. Con distinta espalda, posibilidades y pérdidas, para el referente de la Cecitys las expectativas de mejora de ventas son bajas lo que afecta a importados, grandes, medianos, chinos y nacionales.