Conseguir un auto 0 km hoy es complicado en cualquier parte del país, especialmente para quienes buscan un SUV ( Sports Utility Vehicle ) o un Crossover 0 Km, y el mercado mendocino no es la excepción. La oferta es limitada y aunque en el último mes las concesionarias celebraron algunas entregas, no alcanza para abastecer el mercado.
Como consecuencia, el segmento de los vehículos usados “nuevos” está experimentado un fuerte aumento de la demanda que ha disparado los precios hacia arriba, incluso por encima de los autos que nunca han salido a la calle.
Para graficar mejor la situación, se puede poner de ejemplo el caso del Citroën C4 Cactus, el SUV más vendido de febrero según la Asociación de Concesionarios de Automotores de la República Argentina (Acara). La misma versión que tiene un precio de lista de $ 3.641.200 en las concesionarias, figura en sitios especializados y plataformas como MarketPlace (Facebook), con dos años de antigüedad y 20.000 kilómetros de uso, a un precio de $ 3.650.000.
De acuerdo con Carlos Martín, representante de Acara en Mendoza y propietario de Automotores General San Martín, esto ocurre por la falta de unidades 0 km. “Los potenciales compradores de vehículos nuevos se están inclinando por los usados. Eso ha provocado un aumento en el precio de estos últimos, acercándolos a niveles cercanos al valor de los 0 km (en algunos casos por arriba). El exceso de demanda presiona los precios, mientras que el precio de los 0 km acompaña a las variables de inflación y de devaluación”, indicó.
Al mismo tiempo, el empresario destacó que en la actualidad se abre una puerta para quienes quieran cambiar su vehículo usado por un 0km y es que, pese a que la oferta no es tan variada como en otros años, podrían vender sus autos a precios más que razonables y llegar más fácil al vehículo nuevo que, además, “tiene una financiación con costo por debajo de la inflación”.
¿Conviene cero o usado?
A la hora de comprar un auto hay muchos factores a tener en cuenta. Se debe considerar por ejemplo que a los precios de los vehículos 0 km hay que sumarles alrededor de un 10% en concepto de “costos de entrega”, aunque Montanaro recordó que esto dependerá del modelo y la marca elegida.
Para facilitar la decisión, se pueden analizar los valores de referencia que relevan algunas revistas de autos. En los SUV, por ejemplo, se puede comprobar que los precios de los vehículos nuevos no bajan de $ 3,2 millones, pero el mismo piso tienen los usados de dos o tres años de antigüedad y no más de 30 mil kilómetros de uso.
Hay muchos casos de autos que tienen un precio más alto en el mercado de usados que en el de los 0 km. El Nissan Kicks 1.6 Advance L/21, por ejemplo, cuesta $ 3.315.000 en las concesionarias, mientras que con un año de uso se vende a $ 4.845.000, según la revista Infoauto.
Por su parte, un Toyota Corolla 2.0 SE-G modelo 2020 cotiza a $ 5.150.000 y la misma versión nueva se comercializa a $ 4.694.000 (más gastos de entrega). Llama mucho también la diferencia de un Honda Fit 1.5 EXL, que tiene un valor de lista de $ 2.767.000 en las concesionarias, pero en el mercado de usados se vende a $ 3.900.000 con cuatro años de antigüedad (2018).
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Qué “ceros” se venden en Mendoza
Además de las cuotas de importación que impiden la entrada de vehículos en el país, se registra un “faltante a nivel global de microcomponentes”.
En este sentido de se expresó Leandro Lipari, Gerente en Lorenzo Automotores, quien destacó que pese a los faltantes, existen nuevos lanzamientos que van a cubrir esos espacios, como sucede con el Fiat Pulse, el nuevo auto SUV que viene a competir con el Volkswagen Nivus. “Disponibilidad va a haber. Estamos teniendo muchas consultas, pero la escasez de microcomponentes impacta en todas las marcas”, destacó.
“Nosotros como grupo, tanto para Ford como Fiat y Jeep, estamos teniendo disponibilidad y por las tasas de financiación y entrega, convienen más que comprar un usado”, aseguró.
En el caso de Ford, las camionetas Maverick o Ranger, adquiridas a través de Ovalo, tienen descuentos durante marzo que superan los $ 500 mil; y algo similar sucede en Jeep con el Renegade. Esas bonificaciones, aseguran, revierten la balanza a favor de los vehículos nuevos. “Los precios son muy relativos y dependen de la versión y el modelo, pero hay descuentos que hacen que Ford, Fiat y Jeep estén liderando entregas y financiamientos”, cerró Lipari.
En tanto, en Volkswagen y Chevrolet, vehículos como el T-Cross y la Tracker, respectivamente, se destacan entre las opciones favoritas de los mendocinos.
“Justo este mes hubo más entregas de Volkswagen T-Cross. Abastecimiento hay, y los precios han ido aumentando en la misma medida que la inflación, alrededor de un 5%”, comentó Sergio Montanaro, gerente General y Comercial de Territorio Yacopini.
Al igual que Martín y Lipari, Montanaro no desconoció que hubo retrasos en las entregas, y que la oferta no alcanza a cubrir la demanda, pero destacó que “después de varios meses de limitantes en la oferta, en marzo se vio una mejora”.
Las transferencias cayeron 17% en el primer bimestre del año
Pese a que las ventas de autos se están concentrado en el mercado de usados, las transferencias se mantienen por debajo de los valores del año pasado. Según estadísticas publicadas por la Dirección Nacional de los Registros de Propiedad del Automotor (Dnrpa), entre enero y febrero de este año se vendieron 11.320 autos de segunda mano en Mendoza, frente a 13.630 que se transfirieron en el mismo período del 2021 (-17%).
A nivel nacional la tendencia es la misma, pero la retracción es mucho más leve. Las estadísticas muestran que en el primer bimestre de este año los argentinos transfirieron 239.534 vehículos, 18.804 menos que en los primeros dos meses de 2020, cuando el mercado de usados alcanzó las 258.338 unidades.
En ambos casos, tanto en la provincia como en el total país, se encuentra una caída más profunda cuando se hace una comparación con la prepandemia. La baja respecto al 2019 es del 24% en Mendoza y del 14% en el total de Argentina.
Consumo en baja
Los resultados pueden parecer contradictorios, teniendo en cuenta que se habla de una “demanda pujante” que lleva el precio de los autos usados “nuevos” por encima del valor de los 0 km. Sin embargo, se debe tener en cuenta que la compra de un vehículo implica un gasto grande que no cualquier familia puede enfrentar.
Si bien en 2021 los salarios le ganaron a la inflación, en los últimos años la pérdida del poder adquisitivo ha sido una constante y cada vez se necesitan más sueldos para adquirir un auto, ya sea nuevo o usado. A eso se suma que hay poco acceso al financiamiento.
Por otro lado, referentes del mercado de usados explicaron que la escasez de cero kilómetros también los perjudica, porque al haber menos ventas de unidades nuevas, también hay menos recambio (es común que se entreguen los usados como parte de pago).
