El acceso a internet puede ser bastante placentero, aunque es posible que estemos expuestos a ciertos peligros que, muchas veces, pasamos por alto. Una reciente encuesta de Microsoft en 16 países brindó un alarmante resultado: los jóvenes están entre las personas más vulnerables a los peligros en línea, ya sea por virus informáticos y/o criminales cibernéticos.
Prestá atención a los siguientes consejos para protegerte:
1. Utilizá contraseñas complejas y únicas para cada cuenta
Si alguien tiene las llaves de tu casa, puede entrar y asaltar cada habitación de tu hogar. Lo mismo aplica para contraseñas y cuentas en línea. De manera constante, elegimos contraseñas que son fáciles de recordar, como nombres o fechas de cumpleaños. Pero si son fáciles de recordar, es probable que sea fácil que los criminales cibernéticos las adivinen. Si utilizás la misma contraseña sencilla para diferentes cuentas, los criminales cibernéticos pueden -y lo harán- acceder a su información personal sensible.
Lo ideal es utilizar un administrador de contraseñas para guardar múltiples códigos para diferentes cuentas de manera segura y asegúrense de que cada uno sea complejo. Es recomendable al menos 10 caracteres y una mezcla de números, letras, mayúsculas y caracteres especiales.
2. Utilizá siempre una conexión segura
Cuando utilizás una conexión pública a internet, como el Wi-Fi de un shopping, no tenés control directo sobre su seguridad. Si no podés establecer una conexión segura o no están seguros de que su dispositivo esté protegido, no compartas información sensible.
3. No aceptar invitaciones de extraños
No todas las personas que conocés en línea son quien dicen ser. Es común que los criminales cibernéticos se dediquen a la creación de perfiles falsos en redes sociales para alentar relaciones con usuarios incautos y robar sus bolsillos virtuales, o algo peor.
Si sos abordado en línea por un extraño, que insiste en que compartas información personal o les pida dinero, es sufiente para disparar las alarmas. Si es posible, buscá a la persona de manera directa para ver si la cuenta es auténtica.
¿Aún no estás seguro sobre la identidad de esa persona pero de todos modos querés aceptar su solicitud de amistad? Sólo para estar seguros, limitá la información que la persona puede ver en su perfil desde los ajustes de privacidad.
Recordá: las mismas reglas aplican tanto en línea como en el mundo real, así que no compartas información privada o sensible con extraños.
4. Sé cuidadoso con el lugar al que das click
Una táctica probada y utilizada por los criminales cibernéticos es engañarlos para que descargues malware que les permita robar información. Desde un juego popular hasta una oferta de soporte técnico vía correo electrónico, el malware puede estar disfrazado en una variedad de formas diferentes. Evitá descargar aplicaciones que parezcan extrañas o vengan de un sitio no conocido.
¿No estás seguro si un email es legítimo? ¿El saludo es muy impersonal? ¿Hay muchos errores ortográficos? ¿Hay un extraño sentido de urgencia? Ponete en contacto con la marca o compañía a través de sus canales oficiales como su sitio web o una página de redes sociales. Siempre es mejor revisar varias veces que correr el riesgo de comprometer tu seguridad.
5. Actualizá tus ajustes de privacidad y tu antivirus
Si no actualizás tus defensas, de manera eventual los cibercriminales encontrarán la manera de superarlas. Asegurate de estar al día con las actualizaciones en tus sistemas operativos y hacé un esfuerzo por revisar los ajustes de privacidad en las aplicaciones y navegadores que utilizás.