En otra muestra de que el impacto del coronavirus en los mercados financieros, por primera vez en cuatro años China superó a EE.UU. en la cantidad de salidas a bolsa. Parece una cruel ironía, sobre todo si se tiene en cuenta que la pandemia se inició en el interior del gigante asiático, para luego diseminarse rápidamente a Europa y EE.UU.
Pero la realidad indica que el gobierno chino estaba mejor preparado, reaccionó más rápido o fue más eficiente (el lector puede eligir aquí la opción que le resulte más acertada) al enfrentar el Covid-19 y ponerlo a raya.
Los datos del primer trimestre muestran que las bolsas de Shanghai y Shenzhen registraron 52 ofertas públicas iniciales (IPO), contra solo 24 en Wall Street, donde la psicosis obligó a una postergación de muchas de ellas.
De acuerdo con datos provistos por la consultora EY, en los dos mercados continentales chinos se recaudaron u$s 11.800 millones por salidas a bolsa, contra u$s 7300 en Nueva York. La cifra supera por primera vez desde 2016 las ofertas iniciales realizadas en Nueva York, cuando en 37 operaciones se recaudó u$s 10.500 millones.
Si se incluye Hong Kong en el total de IPO, el incremento interanual para toda China es del 34% en operaciones, y del 100% en volumen, y eso teniendo en cuenta al Covid-19, que se declaró a mediados de diciembre de 2019.
Este proceso se notó mucho más después de la reapertura de los mercados asiáticos tras el parate por el Año Nuevo chino de fines de enero, cuando la situación en la provincia de Hubei (con la ciudad de Wuhan como zona más comprometida) ya era dramática. A favor de las bolsas asiáticas se dio la situación de que, si bien las caídas fueron muy significativas, no lo fueron tanto como en Europa y Wall Street.
En el periodo que fue de enero a marzo de 2020, los índices bursátiles chinos cedieron un promedio del 13%, con el Hang Seng de Hong Kong perdiendo hasta 15%. Distinto fue el panorama en los otros continentes. En Wall Street, el S&P 500 se derrumbó 20%, el Dow Jones 23% y el Nasdaq 14%, más en línea con las variaciones chinas. En Europa, el panorama fue peor, con caídas de hasta 30% en algunos casos.
Para el analista independiente Fraser Howie, "los mercados chinos sufrieron menor volatilidad que sus homólogos mundiales durante la pandemia, incluso cuando gran parte de la economía tuvo que detenerse y los operadores fueron confinados en sus casas. En lugar de operar por teléfono desde sus oficinas, lo hicieron a través de sus celulares y probablemente tuvieron más tiempo sin sus jefes mirando a ver qué hacían".
Al tener más estabilidad que en otras partes del mundo, el entorno permitió que las compañías chinas se animaran a hacer sus ofertas públicas iniciales, algo que normalmente espanta a los nuevos candidatos a entrar en la bolsa, conscientes de que, a mayor volatilidad, más difícil resulta recaudar dinero.
LA MAYOR OPERACIÓN
Entre las operaciones realizadas en China, la más grande desde que comenzó el año fue la de Beijing Shanghai Railway, empresa dedicada a la construcción, que salió a principios de enero en una operación valuada en u$s 4600 millones.
Sin embargo, los analistas ven un gran interés por las acciones de compañías de los sectores de biotecnología y farmacéutico, en línea con las urgencias que impone el Covid-19. Además, China cuenta con un proceso de autorización de medicamentos mucho más veloz que en Europa y EE.UU., por lo que los inversores ven una posibilidad de que el país dé primero con el remedio contra el coronavirus.
De acuerdo con un informe de la consultora Frost & Sullivan, el crecimiento de los productos biológicos chinos superó al crecimiento a nivel mundial, y se espera que el sector alcance ventas de casi u$s 200.000 millones en 2030, otra señal de la dinámica de la economía china.
Este dinamismo del gigante asiático lo marca el panel de compañías tecnológicas de la bolsa de Shanghai, conocido como "Star Board". Para el analista Ringo Choi, a cargo de las salidas a bolsa en Asia Pacífico de EY, este panel ayudó a que muchas empresas de menor tamaño se animaran a hacer sus IPO y los pudieran hacer más rápido. En el primer trimestre de 2020, el Star Board registró 23 salidas a bolsa por u$s 4100 millones.
Sin embargo, con una economía mundial tan globalizada y con un perfil de las empresas chinas orientado a los mercados internacionales, si la situación no se revierte pronto en los principales países desarrollados, el récord de salidas a bolsa chino no durará demasiado. Como si fuera un boomerang, la crisis del resto del mundo terminaría impactando en quienes se preparan para hacer su oferta inicial.