La mejor jugadora del hockey nacional, esta a dos días de despedirse en Mendoza del hockey profesional. Y hoy, en conferencia de prensa se centró en el partido de mañana (19 horas) contra Holanda, por la semifinal del Champions Trophy.
El equipo como grupo se afianza. Se vio un progreso al transcurrir los partidos. Al respecto, la delantera confió: “Hay muy buena predisposición para buscar esa química que nos venía faltando. Hoy lo estamos viviendo y por suerte se está plasmando esa buena onda adentro del campo de juego".
Y para enfrentar al último campeón del mundo, “el equipo está con mucha confianza para el partido con Holanda, que ha sido el rival mas fuerte de los últimos tiempos. Tenemos mucha confianza con el juego que estamos teniendo. Se le puede ganar”, aseguró "Lucha".
“Hemos visto todo los partidos, pero en particular a Holanda y a Australia. Las holandesas están en un periodo más de transición, que es difícil tras el cambio de entrenador". De todas maneras, “no me quedó con los primeros partidos que hizo en la zona Holanda. Cuando tienen que jugar por los puntos lo hacen muy bien. Sigo pensando que son muy fuertes. Lo pienso así para que Argentina salga bien concentrada”.
La química es lo que mejor pudo consolidar Las Leonas en este último tiempo. De hecho, para Aymar, “la confianza no es el único fundamento de la mejora. Creo que nos estaba faltando también la predisposición, la unión. Lo logramos conseguir en este último tiempo y se puede ver dentro del campo de juego. Estamos siendo sólidas como equipo y eso es fundamental”.
En esta transición, donde se necesitaba rodaje de partidos internacionales, el equipo de Capurro llegó a su punto más alto (pese a que se trató de China, el rival más débil del certamen). Y tras la golada (7-2) las jugadoras se aflojaron de tanta tensión acumulada. Y en esto coincide Luciana al decir que “el resultado ante China fue histórico y se disfrutó mucho. Con un resultado tan favorable es lógico jugar con tranquilidad. Hacía mucho que el equipo no podía disfrutar tanto de un partido, de un torneo. Por eso después nos sacamos fotos con nuestros amigos y familiares en la cancha”.
Sin embargo, Holanda es una piedra en el zapato. Es el rival a vencer: “Es especial porque Holanda y Argentina es un clásico histórico. Estamos tranquilas porque se le puede ganar. Estamos con confianza y el equipo está bien. Sabíamos que podía pasar y por algo se dan las cosas. Mañana podemos hacer un gran partido y llevarnos un resultado positivo”, aseguró.
Luciana toma este Champions Trophy de manera especial, donde puede disfrutar no sólo con las integrantes del equipo sino con su familia donde, según ella confió, sus padres dijeron que está jugando mejor, aunque ella prefiera no hablar de su nivel.
Y tal vez porque ne cierta manera lo disfruta con un poco menos responsabilidad que cuando portaba la cinta en su brazo. De todas maneras, su teoría es que la cinta de líder "se da naturalmente" y dejó en claro que seguirán existiendo jugadoras con esa capacidad. "A veces uno espera que determinadas jugadores lo haga y no pasa. Cada una tiene su rol. Creo que el hecho de que no este en el equipo, otras lo tomarán”.
Finalmente, y cerrando el tema del pasado conflicto en Las Leonas, después del Mundial de La Haya donde ella debió mediar, Luciana Aymar, la gran capitana aconsejó que hay que adaptarse a las distintas situaciones, asegurando además que las diferencias quedaron atrás y que actualmente en la selección van todas "para el mismo lado".
“Mi postura fue siempre la misma. En un deporte en conjunto hay cosas que te van a gustar y otras que no. Vas a tener que ceder y en otras no estás de acuerdo. Pasa de todo. Para que el equipo funcione hay que tener buena predisposición. A veces me tocó ceder, pese a que no estaba de acuerdo. Hoy todas tiramos para el mismo lado”.