Animarse al cambio en la mitad de la vida

En esta nota te acercamos consejos de profesionales mendocinos para enfrentar y disfrutar los desafíos y oportunidades, más allá de tu edad.

Por Zulema Usach

Hoy, cada vez más mujeres deciden escuchar su voz interior y dan la bienvenida a nuevos aires más allá de la edad. Entre los 35 y los 50 surgen inquietudes, desafíos y oportunidades que muchas eligen no dejar pasar. Cómo enfrentarse a lo nuevo y disfrutar de ese proceso.

Cuando la voz interior indica que es momento de arribar por senderos inexplorados sin dejar atrás lo vivido, las preguntas se disparan desde lo más profundo: ¿Será una decisión correcta? ¿Y si lo intento y me va mal? ¿Para qué cambiar si estoy bien así?...Las respuestas, tan individuales como complejas, se encontrarán justamente, en ese devenir un poco más alejado de la rutina y más cerca de nuevos desafíos.

UN PRIMER ACERCAMIENTO HACIA LO QUE SE DESEA CONSISTE EN REALIZAR UN EJERCICIO DE INTROSPECCIÓN YA QUE ES IMPORTANTE ENCONTRARSE CONSIGO MISMO PARA DETECTAR Y EVALUAR LAS PROPIAS NECESIDADES E INTERESES PERSONALES.

Así, en sintonía con los avances logrados en materia de derechos, hoy cada vez más mujeres aceptan romper con la comodidad de lo conocido y, al llegar a la mitad de su vida, se lanzan a nuevos espacios y se plantean metas que antes consideraban difíciles de concretar. Son ellas, las que habiendo ya criado a sus hijos –o sin ellos- intentan poco a poco reencontrarse consigo mismas para desplegar algún talento olvidado, aprender aquello que tanto soñaron o simplemente, focalizar sus energías en aquel hobbie que durante años mantuvieron guardado en algún rincón.

Para las que están en esa incesante búsqueda y para aquellas que aún no se animan a hacer el “click”, numerosas herramientas se plantean desde la psicología y el coaching para derribar fantasmas y aceptar el desafío sin miedo al fracaso. De hecho, si de ir hacia el encuentro de un cambio en la vida se trata, los especialistas aseguran que el primer paso para lograr el éxito es, justamente, no detenerse en la búsqueda y plantearse cada vivencia como una oportunidad de enriquecimiento personal.

Un primer acercamiento hacia lo que se desea -explica el psicólogo y director de la página web Decidir Vivir Mejor, Santiago Gómez- consiste en realizar un ejercicio de introspección. "Es muy importante encontrarse consigo mismo para detectar y evaluar las propias necesidades e intereses personales", dice el profesional y detalla que con el fin de lograr esto es necesario tomarse un tiempo para poder pensar, tomar conciencia de lo que le gusta a cada uno o imaginar cómo le gustaría vivir desde el momento en que decide modificar uno o más aspectos de su vida.

LA MOTIVACIÓN INTRÍNSECA ES FUNDAMENTAL YA QUE MUCHAS VECES NOS CONVENCEMOS DE QUE NO HICIMOS ALGO POR FALTA DE TIEMPO, CUANDO EN REALIDAD LO QUE HAY ES FALTA DE INTERÉS.

Ese instante de sosiego que permita visualizar el interior con más claridad, aclara Gómez, debe ir acompañado de una ruptura en la rutina diaria, por lo que es primordial realizar actividades placenteras con el fin de evitar el estrés. Estos mismos aires serán los que propiciarán el reparo necesario para terminar con el cansancio, mejorar la calidad de vida y abrir paso a la capacidad de disfrute.

A partir de ello, las metas postergadas o bien, las nuevas que vayan surgiendo serán cumplibles en la medida en que la persona se organice y planifique actividades realistas, ajustadas a las posibilidades vigentes y cotidianas. De este modo, se evitarán frustraciones, asegura el psicólogo. Pero, ¿es posible romper con el miedo a lo nuevo? Gómez asegura que sí. "Es normal que frente a lo desconocido, surja el miedo y la ansiedad anticipatoria. Esto sucede porque puede existir un temor a lo desconocido, miedo a dejar el estado de confort y seguridad", explica el especialista y comparte que una manera positiva para terminar con la incertidumbre y el temor a lo desconocido, es descubrir cuáles son esos miedos y reflexionar sobre ello. "La única forma de derribarlos será, justamente, mediante una acción", recalca Gómez.

María Eugenia Salinas es magister en Coaching Ontológico certificada. A lo largo de su experiencia como profesional que ha colaborado al descubrimiento personal de numerosas mujeres, ella destaca que una de las vivencias más frecuentes es, justamente, la existencia de una fractura en el continuo vivir. "Muchas mujeres muestran una necesidad de completud, se replantean cuáles son las cosas importantes que están haciendo y cuáles son los aportes que están realizando". A partir de allí, la respuesta individual puede encauzar a cada persona por senderos insospechados.

Unido a esos nuevos planteos surge la incertidumbre y la necesidad de hacer nuevas cosas. "Eso sucede cuando no te identificás o sentís que en realidad podés dar más de lo que estás dando, es ahí cuando hacés el quiebre y te animás a una nueva búsqueda", destaca Salinas.

Para quienes se encuentran en ese proceso de cambio, la motivación es crucial. "Muchas veces nos convencemos de que no hicimos algo por falta de tiempo, cuando en realidad lo que hay es falta de interés", dice la experta en recurso humano y explica que este último concepto se da en cinco niveles: querer, pensar, decir, y actuar. Porque en definitiva, expone, "el querer trascender implica una evolución del ser; tiene que ver con la imagen que he construido de mí misma una vez que llegue a una edad más avanzada".

En ese sentido, salinas detalla que la extensión de la esperanza de vida es otro factor que ha colaborado a que, a diferencia de épocas pasadas, la mujer se proyecte de otro modo cuando ronda los 40. Por eso, considera, "no hay edades para plantearse nuevos desafíos y nutrirse de conocimientos en todos los planos".

HAY QUE HACERSE LA IDEA DE QUE LOS CAMBIOS TIENEN ALTIBAJOS Y QUE SE DAN A LO LARGO DEL TIEMPO. NO TODO ES INSTANTÁNEO, COMO LO DICTAN LOS ACTUALES TIEMPOS POSMODERNOS.

A la hora de encarar un nuevo desafío y romper con lo ya dado -o más bien logrado- la coach recomienda tener un horizonte de frustración amplio, de manera que "la mujer no tire la toalla antes de haber comenzado". Otra pauta para llegar a bien puerto, consiste en pensar objetivos posibles de mantener en el tiempo. "Hay que hacerse la idea de que los cambios tienen altibajos y que se dan a lo largo del tiempo. No todo es instantáneo, como lo dictan los actuales tiempos posmodernos", recalca Salinas.

Por su parte, el psicólogo Daniel Venturini aporta que una herramienta fundamental para concretar cualquier sueño es ante todo, sentirse libre de elegir su vida, ya que no hay límites a la hora de bucear entre las infinitas posibilidades existentes. "Toda mujer debe tener la libertad y el respaldo suficiente para poder cumplir sus objetivos", considera el psicólogo, consciente de los logros que en las últimas décadas ellas han llevado adelante en todos los planos de la vida social.

A Ileana Corvalán (37), por ejemplo, la necesidad de cambio le surgió luego de haber logrado su título como contadora pública y tener un puesto afín en el sector público. "Me dediqué durante años a perfeccionarme y puse lo mejor de mí a la carrera que tanto amo. Pero hace dos años comencé a sentir que algo me faltaba para sentirme completa", relata y agrega que ese vacío era la falta de un hijo. "Tengo a mi pareja; él siempre quiso tener niños y ya lo iba postergando. Ahora seguimos en la búsqueda y no tengo miedo a que mi rutina se modifique. Sé que un bebé te cambia la vida así que estoy dispuesta a todo", dice la mujer tras haber quebrado con las barreras que la alejaban de su actual sueño de maternidad.

El caso de Romina Bracamonte (42), es distinto. Fue mamá desde muy joven y ahora, cuando Mariana (16) y Eugenio (19) son más grandes, ella desea encaminar su vocación hacia la pintura. "Ya lo decidí, así que acomodé mi rutina para estudiar la carrera. No importa dónde trabaje luego, es algo que siempre quise aprender", dice la mujer que sueña con desplegar su talento escondido.

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