Alfredo Cornejo cumple este lunes un año de gestión en su segundo mandato como gobernador de Mendoza. El sancarlino realiza un balance positivo dentro de todos los desafíos que tiene al frente de la provincia, admite algunos puntos bajos de la situación económico/social de la provincia, y también mantiene los pies sobre la tierra respecto a la gestión local y lo que se podrá hacer a futuro, aunque enfatiza en el “orden” local y en la macroeconomía nacional como motores de desarrollo.
Luego de recibir a Los Andes en su despacho en el cuarto piso de Casa de Gobierno, asegura que la incertidumbre que tenía con la gestión de Javier Milei ha disminuido, afirma que tiene “mucha esperanza” en el futuro inmediato de Mendoza y no descarta una eventual alianza con el libertario para los comicios 2025. También habla de la minería “fuera” de Malargüe y de las dudas que todavía le genera este atípico Gobierno nacional.
-Cuando arrancó su gestión se mostró con incertidumbre respecto a Milei ¿eso ha cambiado?
-Yo creo que la incertidumbre sobre la economía está disminuyendo. Tengo mucha esperanza en el futuro inmediato de Mendoza si seguimos en esta misma dirección, y a su vez tengo menos incertidumbre. Pero hasta aquí lo que se ha hecho es el equilibrio fiscal, condición sine qua non, pero no suficiente.
-¿Qué falta?
-Hay otras reformas que requieren altos consensos, como las laborales, las fiscales y demás. Esas van a ser todo un desafío y creo que el gobierno tiene que concentrarse en eso, así como también la oposición colaborativa, en la que me inscribo. Hay que modificar cosas. La relación fiscal con las provincias es elemental para el futuro y el crecimiento sostenido del país.
Pongo ejemplos. Las funciones sustantivas del Estado quedan en manos de las provincias. La educación pública está en manos de las provincias, exceptuando la universidad. La salud pública también, exceptuando pequeñitos efectores nacionales. Lo mismo con la administración de Justicia. Un divorcio, un contrato, una adopción, los litigios laborales, los resuelven las administraciones de justicia provinciales. Entonces se necesita más Estado. Yo creo en un Estado fuerte, inteligente, eficaz, eficiente, que tiene que estar radicado básicamente en las provincias. Y ni hablar de seguridad, que tiene una parte concurrente con la Nación en lo que respecta al crimen organizado, con las fronteras y demás, pero el resto es genuinamente provincial.
-¿Y qué se necesita?
-Un pacto fiscal, un acuerdo nacional, federal, que es más o menos lo que firmamos en el Pacto de Mayo. Es decir, dividamos bien cuáles son las funciones que nos vamos a hacer cargo en las provincias y acá, “tirame” el Estado, que yo lo aguanto como provincia, pero tienen que estar bien financiadas las provincias para cumplir esas tareas estatales. No destruir el Estado, sino que necesitamos Estado.
-¿Es optimista respecto a que pueda haber un pacto?
-Hoy no están en la agenda del gobierno esos diez puntos del Pacto de Mayo, que hay que traducirlos en acuerdos concretos, en leyes laborales, fiscales, en acuerdos entre Provincia y Nación de qué cosas hace cada cual.
-¿Eso pasa incluso con las obras?
-No tienen totalmente definido cosas que son competencia de ellos, como son las rutas nacionales. En Mendoza somos muy dependientes de Vialidad Nacional porque nos recorren seis rutas muy relevantes, entre ellas tres que son clave, la 7, la 40 y la 143, troncales a la provincia. Eso no lo tienen resuelto desde Nación, y las rutas están destruidas.
-¿Alguna obra se ha reactivado?
-Las que hemos logrado restablecer, que no es poca cosa para lo mal que estábamos, son la Variante Palmira y los puentes en el Valle de Uco. Pero en lo de los puentes, la empresa está reactivando tímidamente, porque le pagaron otras obras desde Nación.
-¿Y la 40 a San Juan?
-Está “neutralizada”. La pararon, ellos le llaman “neutralizar”, que significa que no está descartada, como otras a nivel nacional que no las van a continuar.
Fin del Presupuesto 2025
-¿Qué hay del hecho de que no haya Presupuesto 2025?
-Yo creo que el gobierno debería haber sido el más preocupado en que hubiese Presupuesto. Habla bien de la reputación del país en los mercados y da certidumbre política. De hecho, el gobierno empezó a mejorar su reputación cuando logró la ley Bases. No tener presupuesto es una mala reputación para los mercados.
Nosotros estábamos pidiendo una negociación en el Presupuesto, con puntos que no tocaban el déficit fiscal y que eran razonables en el marco del Pacto de Mayo. No se ponía en riesgo el déficit cero y tenían que ver con la distribución del impuesto a los combustibles, la compensación del impuesto al cheque, entre otras. Pero ya estaban inflexibles.
-¿Le preocupa que Mendoza esté perjudicada con los Aportes del Tesoro Nacional y se los haya enviado a otros aliados?
-No tengo una opinión categórica porque los ATN que han enviado han sido pequeñitos. Pero también debo reconocer que me parece raro que aparezcan algunas provincias y no otras. Al principio de año hubo a Corrientes cuando tuvo incendios. Esa es la función del ATN.
La situación provincial
-¿Qué balance hace en lo provincial?
-Yo tengo un balance muy positivo de este primer año. El gobierno tiene iniciativa política en leyes y en gestión. Tiene programa y está siendo acompañado en algunos aspectos por la oposición (dividida o en otro unánime), pero casi ninguna ley la hemos sacado solo con los votos propios. Ahora, esas leyes hay que gestionarlas para hacerlas realidad.
-¿Cómo cuáles?
-Por ejemplo, las de salud. Hemos ido con 26 leyes, que algunas podrían haber salido quizás por decreto, pero le quisimos dar solidez institucional. Necesitamos gestionarlas con posterioridad. Vamos bastante rápido, yo estoy conforme, pero la ciudadanía no va a ver los resultados inmediatamente.
La más emblemática es la que pueden cambiar de régimen, que es para poder pagarles a los médicos de otra forma y por productividad, y van a ganar más. De hecho, estamos proyectando en 2025 más dinero en los sueldos de los salarios de médicos. Pero para eso tenemos que tener digitalizados la totalidad de los hospitales y consultorios del Estado. No es sólo sacar una ley.
-¿Qué opina de la inseguridad?
-En seguridad nosotros estamos desarrollando un plan. Claro, la vulgaridad de la deliberación pública en la provincia lo tira abajo. “Pero ¿cómo? Si le robaron a mi tío, le robaron a este, le sacaron el neumático al otro”. Y sí, hay inseguridad, pero no es la Franja de Gaza.
Mendoza es un lugar que tiene inseguridad como la mayoría de las ciudades argentinas. Y tiene mucho que ver con la economía en negro, que son los delitos que han aumentado, con el robo de neumáticos, de celulares, elementos de trabajo. Hay muchísimos casos de inseguridad. Hay pirañas en la noche robándose el neumático de autos que duermen afuera.
-¿Qué otros?
-La ruralidad es un escándalo, robos en lugares donde la policía no puede prevenir. Y para todo tienen un mercado negro de ventas de esas cosas. Esos son los delitos que han crecido... ahora, los que nos propusimos combatir en el plan de seguridad en los últimos años, todos han bajado, como los homicidios y robos agravados.
Tenemos leyes que estamos sacando para apuntar contra el robo menor que tiene mercado negro. Y claro que hay también muchos detenidos por la policía, que no son noticia. Pero Mendoza está mejor en materia de seguridad general porque se está desarrollando un plan. El año que viene después de la Vendimia vamos a incorporar todo el software de identificación de rostros y que salten las alarmas de todas las personas buscadas, sospechosas y denunciadas, en las cámaras que tenemos. Hay mejor equipamiento policial, hay un número de policías superior al que había y con más exigencias.
-¿Y el narcotráfico?
-Es obvio que tenemos los mismos problemas que tiene toda la Argentina en ciudades, en los barrios hay chicos que ganan mejor (Ndr: en el narcotráfico) que un obrero de la construcción y ese incentivo existe independientemente del gobierno provincial. Eso tiene que ver con la economía en negro, con el deterioro social.
Ahora, no hay narcotráfico organizado en Mendoza, sí hay tráfico de drogas y hay pequeñas organizaciones que se las está combatiendo.
La eventual alianza con Milei
-¿Analiza una alianza electoral con Milei?
-Hay una comunión, un núcleo duro de coincidencias. Yo no descartaría que pudiésemos ir juntos. No hay ninguna propuesta que se nos haya hecho, pero no lo descartaría. Pasó desapercibido, pero los funcionarios de Milei Luis Lucero, Pablo Quirno y Juan Pazo, hablaron (Ndr: en la cumbre minera) de la alta institucionalidad de Mendoza para el clima de negocios. Si un gobierno nacional que no regala elogios, opina así, no sería nada raro que tuviésemos un frente.
-¿Y qué lo hace dudar?
-También veo que hay diferencias. Yo no creo en demoler el Estado. Al contrario, quiero un mejor Estado para trabajar en la igualdad de oportunidades y en las funciones estatales que tiene la provincia. En materia de seguridad quiero más Estado, y así en el resto de los temas de los que nos hacemos cargo.
Pero además, yo voy a tratar siempre de que el programa de mi administración no sea modificado, y que lo que tenemos previsto hacer, vaya en esa misma dirección. No quiero resignar eso.
Lo que ocurre es que los que se visten de mileistas, también tienen la idea en Mendoza de que cuando ganaron la elección fue por ellos, y la verdad es que la ganaron por Milei. Entonces, muestran diferencias con el gobierno provincial, pero son inconsistentes con lo que piensa el gobierno nacional del gobierno de Mendoza.
La “licencia social” de la minería fuera de Malargüe
Cornejo también hizo referencia a la minería fuera de Malargüe, que es la comuna donde ha hecho hincapié particularmente en esta gestión, y dio detalles del objetivo del Gobierno de acuerdo a lo que podría “ofrecer” la actividad minera a la provincia, en materia de conectividad en telecomunicaciones y también mejora de caminos.
-¿Se trabaja en el Gobierno para conseguir licencia social fuera de Malargüe?
-Sí, pero la “licencia social” está bastante discutida en el mundo. ¿Qué es licencia social? ¿Quién dice que algo tiene licencia? Sí se está trabajando en que los mendocinos comprendan que la minería sostenible es una actividad que le ayuda al resto de las industrias, al comercio, a la agricultura, al turismo. Hoy la minería no es la típica minería de pico y palo de antaño, tiene mucho de conectividad. La inversión minera va a traer inversión en los campos. Si la minería va a lugares más rurales, vamos a tener más conectividad y más caminos.
Pero lo que no vamos a hacer es forzar. En el Valle de Uco sabemos que hay cobre a montones, pero también tenemos claro que no tiene sentido porque vamos a tener un conflicto.
Y no vamos a conseguir unanimidad, sino a una mayoría importante, con líderes de opinión que comprendan las potencialidades que tiene la minería sustentable.
“No le veo un tiempo corto a San Jorge”
Cornejo dio precisiones sobre el futuro del frenado proyecto minero San Jorge, en Uspallata.
“No ha presentado su Declaración de Impacto Ambiental. Si la presenta y cumple los requisitos legales, con la prohibición del ácido sulfúrico, cianuro y demás, deberá hacerse una audiencia pública en la propia Uspallata. Y habrá informes sectoriales”, afirmó.
Y agregó: “no le veo un tiempo corto a esa definición, no lo veo inmediato. Arranca con la DIA pero no es inmediato que funcione”.
“Sé que han contratado gente para tener otros métodos de explotación y sería perfectamente compatible. Sabemos que se están moviendo, pero no nos han dado fechas”, cerró.
Elecciones 2025: desdoblamiento y “dos boletas únicas”
Sin ser concluyente, el gobernador se inclinó por mantener el desdoblamiento de las elecciones en 2025.
“Las elecciones separadas permiten evaluar a los ciudadanos si premian o castigan al gobierno en base a su gestión. Me parece más transparente. Además, la agenda nacional opaca a la agenda provincial. Y ese sí es un tema relevante. Y a mi gobierno, que ha tenido iniciativa política, la agenda nacional nos tapó”, expresó.
También aclaró que “en esta elección el arrastre nacional de la boleta sábana no existe, porque si votáramos el mismo día, se haría con dos boletas únicas, que estarían separadas, en el mismo cuarto oscuro, pero que entrarían a urnas distintas”.
Son “verdes”: figuras opositoras que elige el Gobernador
-¿Quién es el dirigente de la oposición que usted valora?
-Este chico del Partido Verde que es joven y nuevo, se mueve muy bien.
-¿Emanuel Fugazotto?
-Fugazzotto. O el otro que entró también por el Partido Verde (ndR: Mauro Giambastiani). Los dos se ven con buena formación. Pero el problema de la oposición es que no tiene un programa alternativo al que lidero yo, que tengo un equipo detrás. El programa del kirchnerismo es colgarse de las faldas de Cristina. Y los nuevos opositores, que eran socios de Cambia Mendoza, tampoco. Como el kirchnerismo, se quieren colgar de Milei. Ahora son todos mileístas y con eso pretenden ganar futuras elecciones.
Más críticas a la oposición
Cornejo detalló por qué piensa que la oposición no tiene un programa alternativo. “Nuestro programa es de sentido común y cosas razonables. Desarrollar algunos de los pocos motores económicos que podemos, como la minería sostenible, la reactivación del petróleo, o cómo hacer energía. Yo creo que ahí residen las votaciones, y no hay un programa alternativo”, señaló.
Sostuvo que la oposición vota muchas veces en contra, pero sin un programa que lo confronte. “Esto viene de las últimas campañas electorales. ‘Cornejo no; Cornejo es lo peor’, dicen, pero hay una consigna vacía que demuestra la falta de un programa alternativo”, asestó.
Puso dos ejemplos de la Legislatura: Los Penitentes o el Código de Procedimientos Mineros.
Sobre Penitentes, dijo que habría que haber llamado a licitación cuando se terminó la concesión en 2013 (gestión de Francisco Pérez); y que cuando tomó el control de la Provincia comenzó ese proceso “pero la empresa no quería abandonar el lugar”.
Ante esto, expropiaron terrenos donde estaban los medios de elevación, que no estaban en la concesión y que habían sido comprados por la empresa. “Tuvimos que expropiar esos polígonos; y la chicana de la oposición fue “Cornejo es (Nicolás) Maduro porque está expropiando como en Venezuela. Primero, no se expropió una empresa, fue un terreno. Ahora bien: ¿Alguien escuchó cuál era la alternativa a eso? Opción uno, la alternativa era renovárselo a la misma gente para que siguiera sin invertir, como no invertía hacía quince años. Hay que hacer otro tipo de inversiones, fabricar nieve, tener hotelería de primer nivel. Se requieren grandes jugadores. Pero el tema es que nadie propuso otra cosa”, planteó.
El otro ejemplo que dio Cornejo fue con el Código de Procedimientos Mineros, y expresó que la oposición “votó un solo artículo, en contra, que era Impulsa Mendoza. ¿Cuál era la propuesta alternativa? En minería necesitamos a alguien intermedio que presione a las empresas a explorar e invertir. Las cinco provincias que ponen de ejemplo, tienen empresas y cobran el “carry”. De hecho, Impulsa fue votada por los legisladores del demarchismo en su creación. Y su capitalización en el 2022, antes de que rompieran con Cambia Mendoza, también fue votada”.
Ante eso, sostuvo que si tenían “dificultad” con un artículo, “podrían haber votado en general a favor y en contra del artículo. Pero no, presentaron un despacho alternativo que era copia y pega del original del gobierno, y sin ese artículo. En un único cambio. Falta un programa alternativo”, insistió.
El broche: la mirada sobre la Justicia
Los comentarios sobre la oposición dieron pie a otra crítica a este sector por su postura en materia de Justicia, justo cuando Cornejo acaba de enviar a la Legislatura el pliego para ministra de la Corte provincial de la camarista Norma Llatser.
“Y dale con esos temas institucionales ¿De dónde salen los jueces de Estados Unidos?”, se quejó Cornejo, respecto de la crítica por las afinidades políticas de los magistrados. Y valoró: “Nosotros estamos tratando de que la Justicia mejore y las personas que están en la Corte han hecho que las cosas mejoren. En todos los aspectos estamos mejor que hace 8 o 10 años atrás. Son las reformas que impulsó mi gobierno pero también la gestión que hicieron varios de los jueces”.
Cornejo de todos modos se permitió una críticas de “cosas que están flojas, como las audiencias penales”. Expresó: “realmente es un problema haber hecho el Polo Judicial para tener muy pocas audiencias y muchas fracasadas”. Y dijo que solamente en una franja de “tres horas” hay audiencias, cuando el Polo “estaba pensado para que hubiera audiencias “a las 7 de la tarde, a las 9 de la mañana y a las 3 de la tarde”.
De todos modos, el gobernador reconoció que la Justicia penal “funciona mejor que hace 8 años atrás”. También habló de mejoras en la Justicia Civil y la de Familia. “Y la Laboral ni hablar”, remató.
“Hace 10 o 12 años atrás había colapso de la Justicia Laboral. Los discursos de (Jorge) Nanclares (Ndr: expresidente y exmiembro de la Corte) hace 20 años decían que había que hacer la oralidad y eso se hizo en mi gobierno, no se hizo en la Corte. No estoy culpando Nanclares, estoy diciendo que objetivamente era el que decía muchas de las reformas que se terminaron haciendo en mi primer gobierno y los números de la administración de Justicia también son positivos. Ahora, si alguien dice que funciona muy bien la Justicia, no, no funciona bien, tiene muchísimos problemas y muchos defectos. Hay bolsones de improductividad y gente recargada en otras áreas. Ahí tiene que poner liderazgo la Corte en cada uno de los fueros”, remató.