Yolanda Ayarce vive frente al Montecaseros, donde tiene su casa y una despensa. A ella le gustan las plantas y no contenta con el enorme jardín que ha cultivado frente a su negocio, tomó para sus flores todo el paseo que hay frente al club, donde la comuna entubó un desagüe y sobre él construyó veredines, puso luminarias y asientos.
“Las plantas de afuera del club son mías y en cada primavera, esta larga vereda se llena de verde y de flores”, cuenta la mujer y se declara hincha del Lobo del Norte “como todos por acá”.
En invierno, la vida de las plantas se retrae y también la belleza de sus flores, pero con la llegada de octubre Yolanda comienza a cruzar la calle y con la ayuda de su marido renueva plantas y tierra: “Se pone todo muy lindo y es un paseo agradable”.