El número de involucrados en hechos de violencia política que fueron detenidos durante las últimas 48 horas en la ciudad de Buenos Aires ascendió ayer a 16 personas, con el arresto de una decena de presuntos anarquistas y de dos hermanos que fueron denunciados por supuesta relación con el grupo político libanés Hezbollah.
Las detenciones que se desataron el miércoles tras los fallidos atentados con explosivos caseros en el cementerio de la Recoleta y en la vivienda del juez federal Claudio Bonadio suceden en medio de alertas por la aparición de paquetes sospechosos como el que la tarde de ayer dijo haberse encontrado en la galería subterránea del Obelisco.
Los hechos tienen lugar a días de la reunión del Grupo de los 20 (G20), que del viernes 30 al domingo 2 de diciembre convocará en Buenos Aires a los principales líderes mundiales, aunque por ahora ninguno de los integrantes del Gobierno, incluido el presidente Mauricio Macri, relacionó con la cumbre los hechos violentos del miércoles y las detenciones que les siguieron.
"Es prematuro establecer alguna conexión", dijo en declaraciones periodísticas el ministro del Interior, Rogelio Frigerio: "Son hechos graves. Son actos terroristas. Nos estamos ocupando". Mientras que su par de Seguridad, Patricia Bulrrich, arriesgó sin más que entre los ataques en el cementerio y en la vivienda del juez "hay absoluta conexidad" y aseguró: "Son personas del mismo tipo de orientación anarquista" y "todos vivían en el mismo aguantadero".
El Presidente, por su parte, advirtió también en declaraciones periodísticas que van a “actuar con todo el peso de la ley ante estos intentos de atentados”. Macri agregó: “Esperamos determinar de esclarecer si todos los detenidos son los responsables o hay más, pero esto no pasará de largo”.
El propio juez Bonadío se rehusó vincular el atentado a su vivienda con la causa de los cuadernos que está su cargo, a diferencia de lo que sí hizo -sin dar fundamento alguno- el fiscal de la misma, Carlos Stornelli. "Estoy conmocionado", dijo, y no descartó que pueda haber nuevos atentados del mismo tipo: "Era una bomba de un poder importante, no creo que se termine en este acto terrorista, hay mucho por investigar".
En esa línea se expresó también la gobernadora bonaerense María Eugenia Vidal: "Ningún argentino ni menos un juez que busca la verdad tiene que estar sometido a esto", dijo Vidal, a la vez que pidió "no tener miedo frente a estas cosas".
El jefe de la Policía Federal, Néstor Roncaglia, aseguró a su vez que los dos episodios "no van a pasar como hechos comunes" y resaltó que se trata de hechos "graves de intimidación pública". Mientras que el secretario de Seguridad porteño, Marcelo Dalessandro, evaluó que hay "grupos anarquistas peligrosos" y dijo que los episodios no son "hechos aislados", por lo que no descarta que puedan producirse otros durante la reunión del G20.
Red anarquista
Ayer, durante el allanamiento a una vivienda en el barrio porteño de San Cristóbal, la Policía Federal detuvo por orden judicial a diez personas que la ocupaban ilegalmente. Los detenidos son siete hombres y tres mujeres (más un menor de edad) y pertenecerían a una agrupación anarquista, dijeron fuentes policiales; en el lugar encontraron elementos para fabricar bombas caseras.
Los detenidos tendrían relación con la pareja detenida tras el fallido atentado con explosivos caseros en la tumba del coronel Ramón Falcón, muerto a tiros por un militante anarquista a principios del siglo pasado. La pareja de detenidos la integran Anahí Salcedo, de 33 años, quien está en coma por las quemaduras que sufrió, y Hugo Rodríguez, de 38. También estarían vinculados con Marco Viola, de 26 años, detenido por la policía después de haber arrojado una bomba casera en el jardín delantero de la vivienda de Bonadio, juez que tiene entre otras la causa de los cuadernos, en el barrio Belgrano.
Pero a estas detenciones de supuestos anarquistas violentos se agregó la tarde de ayer el allanamiento policial a una vivienda del barrio Floresta. Allí fueron detenidos los hermanos Axel Ezequiel y Kevin Gamal Abraham Salomon, argentinos de 25 y 23 años, respectivamente. Los dos fueron denunciados por la DAIA a partir de un correo electrónico anónimo según el cual tendrían relación con el Hezbollah. En la vivienda se secuestraron armas, algunas de grueso calibre, y municiones.
Sobre el final de la tarde, la policía realizó otro allanamiento en el barrio de Villa Crespo. Esta vez se trató de la sede del club La Cultura del Barrio que frecuentan punks y skinheads.
Los Obelos, un grupo con antecedentes criminales
Fuentes de la investigación del atentado del miércoles en el cementerio de la Recoleta identifican a los dos detenidos tras esa explosión, Anahí Salcedo -que resultó herida cuando manipulaba la bomba casera- y Hugo Rodríguez, con el grupo anarquista Los Obelos, cuya sede fue allanada ayer.
En el allanamiento de una casa tomada en la calle Pavón (barrio de San Cristóbal) fueron detenidos diez hombres y secuestrados caños, bulones y miguelitos como los que se usan para armar el explosivo que hizo explotar Salcedo frente a la tumba de Ramón Falcón, un policía asesinado hace 109 años por un anarquista.
Los Obelos están vinculados con varios crímenes y delitos. El más resonante de ellos fue el asesinato del músico de la banda punk Superuva, Juan Ledesma, ocurrido una madrugada de febrero a la salida de un bar en Quilmes. El autor, Ariel 'El Largo' Christian Genez, vivía en la casa de la calle Pavón con los otros miembros de Los Obelos.
Según testigos de ese asesinato, Genez mató a Ledesma junto a tres mujeres. "Primero el grandote le dio una puñalada y, con las tres mujeres, lo tiraron al piso. En el suelo el hombre le clavó la navaja dos veces más. Yo, desesperada, intenté sacarlo de encima. Le di un mochilazo a ese hijo de puta y entonces las minas y el tipo me pegaron a mí", le dijo en febrero a Clarín Carla Gómez Bragatto, novia del asesinado.
Martín Lalo, el bajista de Superuva, se acercó ayer a la casa de la calle Pavón mientras ocurría el allanamiento para denunciar que efectivamente en el lugar continuaron viviendo varios de los imputados en la causa por el crimen de su amigo.
“Genez participó de incidentes en una marcha por Mariano Ferreyra, rompió autos y después participó del homicidio de Juan y ahora están poniendo bombas. Si los hubieran detenido antes no nos hubiéramos comido el garrón con el asesinato de Juan”, afirmó el bajista.
La banda de Los Obelos nació en los ‘90. Se hacen llamar así porque en sus comienzos se reunían en los alrededores del Obelisco. Protagonizaron varios incidentes además del asesinato de Ledesma: uno de los más recordados ocurrió en 2003 cuando ingresaron a un show en Flores y provocaron una pelea que terminó en una batalla campal. Se definen como “anarkistas y anti-skinhead”.