Ximena Hernández comenzó en la provincia como diseñadora hace años creando y desarrollando su propia marca, “Seraphita” (en el 2007); para luego (en el 2011) partir a Buenos Aires, como un modo de apostar al crecimiento de su propio sello.
Desde allí la inquieta asesora de imagen y docente (además de diseñadora) apostó a “Hernández”; una marca de autor independiente, con su propia firma, que vendría luego de “Sheraphita” con un planteo de una etapa más madura y de nuevas búsquedas.
“Volví a Mendoza hace poco porque extrañaba a los afectos, y pensando que iba a poder manejar ‘Hernández’ en Buenos Aires, desde Mendoza. Sin embargo, para avanzar y manejar todo los aspectos del diseño hay que estar en Buenos Aires. Hace un mes que volví nuevamente a esta gran ciudad, con todas las oportunidades que genera”, cuenta la diseñadora a Estilo.
-Lo hiciste de la mano de una nueva colección y la apertura de tu propio showroom. ¿Fue complejo insertarse y apostar todo para un mayor crecimiento de tu marca?
-Sí, por supuesto. Hay que trabajar mucho y ser constante porque no es fácil. En una semana tengo la producción de la nueva campaña de “Hernández”, y en abril abro mi showroom en Recoleta; cosas que no hubiese logrado si no me hubiese venido para acá y no me hubiera movido para que las cosas pasen. Hoy los puntos de venta que tengo son: ropa en la boutique del Faena, en un local de Palermo y en ‘Donde Arístides se Tentó’ de Mendoza.
-Un crecimiento importante desde que te iniciaste con "Sheraphita"...
-Necesité apostar a un avance desde “Sheraphita” porque sentía que esa marca ya no me representaba más. Con un grupo de diseñadores con los que trabajaba, le dimos el gran cambio a “Hernández”. Desde hace tres años me aboco a esta marca propia, que me define.
-¿Cómo te posicionaste con tu marca llegando desde el interior?
-No es fácil. La única manera de avanzar y crecer es moverse, contactándose y capacitándose cada vez más, dedicada todo el tiempo a esto, porque de eso se trata el diseño, de pasión, entrega y de darle el tiempo para que crezca. Hay que estar en movimiento con lo que uno quiere, y así es como las oportunidades van saliendo.
-¿Cuál es el sello de "Hernández" desde la vanguardia?
- La mujer a la cual va dirigido es una mujer que va desde los 25 a los 50 años, y que tiene una mirada joven y equilibrada. Además es muy femenina, con una sensualidad tranquila pero con mucho carácter. Es la que resuelve sola y tiene personalidad. No es un arquetipo vestido de rosa y flores, sin impronta. Sí: es femenina; pero es madre, trabajadora independiente y. ante todo, mujer...
-¿Cómo bajás eso a una colección como la que lanzás ahora?
-La nueva colección se llama el “Viaje de la Mecenas” cuya idea para este invierno nació de un viaje por diferentes ciudades. Se inspira en una mujer emparentada con el arte, con personalidad y carácter, a la que además, le gusta viajar y mixturar lo mejor de diferentes ciudades. Estuve en México, Uruguay, Nueva York... De todos los sitios traje telas, y la mayoría de la colección está realizada con texturas únicas que no se consiguen acá. Se trata de producciones pequeñas con productos de súper calidad, líneas ponibles y únicas.
Es partiendo de este mujer viajera, que conoce el mundo y que juega con las telas en líneas sencillas en las que me inspiré. Las piezas son sensuales y sugerentes, con un poco de línea al cuerpo, y más que nada que apuestan a lo sensual sugerente y cómodo.
-La colección básicamente es prêt-à-porter?
-Hay vestidos de alta noche y alternativas en líneas de lo urbano chic, con camisas de sedas, calados etéreos en espaldas y detalles en puño. Aspiro a colecciones con prendas que una mujer pueda tener en el guardarropas por mucho tiempo. No apunto a hacer la moda del momento, sino a aquello que sea perdurable.
- ¿Cómo se equilibra la vanguardia con la bajada a la calle?
-Parto desde las ideas más locas, o raras, en las que me gusta experimentar y las proyecto en pasarela; para luego bajarlas a la calle, con pequeños detalles, y hacerlas más cercanas a la vida diaria.
-¿Qué es lo más raro de lo que has partido?
-En el invierno 2015 deseaba armar algo con estructura y trabajamos mucho como si fuesen piezas de acrílicos, imposibles en los armados, pero desafiantes como idea. Como me gusta mucho al arte, empiezo muchas veces mezclando todo con pintura; aunque luego no se lleve a las prendas.
- Contame acerca de los tonos de esta colección...
- El color va a estar muy presente aunque, por supuesto, también los básicos negro, nude y blanco. Las polleras, tapados y vestidos, también serán de la partida.
La asesora de imagen
“Hacer una buena elección de colores, conocer qué nos queda bien, y realizar buenas compras es importante”, detalla Hernández; quien además es asesora de imagen desde hace años.
-¿Qué aspectos fundamentales debe saber una mujer, desde la perspectiva de tu tarea de asesoramiento?
-En primera instancia debe saber cuáles son las prendas que le quedan bien a su cuerpo en cuanto a corte. En referencia al color, asesorarse y tener en mente los tonos que le van bien, para que al ir a comprar trate de hacer una compra inteligente de ropa o combinaciones, y en base a esa paleta de colores y líneas que le gusten y queden bien.
-¿Qué es una compra inteligente?
-Comprar aquello que nos sienta bien, para que luego no lo dejemos sin usar, colgado en el armario; porque no lo elegimos a conciencia, y nos dejó de gustar. En las temporadas siempre hay que renovar lo básico: remeras en blanco y negro (y una de color a elección), camisas blancas y negras de buena calidad que nos permitan ir a trabajar, pero también a una cena.
También hay que tener en cuenta el clásico pantalón negro, otro blanco y uno estampado; para ir rotando con los básicos de la parte superior. Una campera de cuero siempre viene bien para todo y es inmortal. Otras alternativas son un blazer en algún tono como negro, blanco, nude o gris; una buena cartera y accesorios para resaltar estas prendas, partiendo de ellas para armar los looks.