Para muchos especialistas en el puesto, Wilfredo Caballero debió ser citado antes a la Selección. Por sus actuaciones en Europa (sobre todo en el Málaga), por su permanencia en el mejor fútbol del mundo, por sus condiciones técnicas. Sin embargo, la chance le llegó recién ahora, a los 36 años y a tres partidos del Mundial. Por eso, al menos en esta gira, todo indica que jugará uno para ver si se puede ganar un lugar en Rusia 2018. Y hay posibilidades de que sea el primero, este viernes, ante Italia.
Lo que está en discusión es el tercer arquero. Y allí, con él, el otro que compite con cierta chances es Marchesín. Sin embargo, la presencia de Willy en esta gira, la posibildad de mostrarse ante Sampaoli a tan poco del Mundial y, acaso, un buen rendimiento en uno de estos partidos, lo ponga con ventaja. La contra: mientras el ex Lanús es titular en el América (15 partidos en 2018), Willy es suplente en Chelsea (ocho juegos en este año).
¿Y Armani? Todo indica que el arquero de River ya no tiene chances factibles de Mundial. Si bien estuvo en la cabeza de Sampaoli, y hasta incluso se habló de que sería convocado como cuarto arquero para esta gira, las evaluaciones que hicieron los especialistas en el puesto que tiene la Selección influyeron para que quedara relegado en esta pelea, más allá de su presente en River.
Caballero, mientras tanto, se tiene una fe enorme. Sabe que tiene el respeto de Messi (cada vez que se enfrentan le tira buena onda) y confía en sus condiciones hasta para discutirle un lugar a Romero: "Voy a pelear para ser titular", dijo. ¿Será uno de los 23?