Un hat-trick en un partido de la tercera división del fútbol inglés no es una noticia de alto impacto. Sin embargo, si el autor de la hazaña se llama Will Grigg, la viralización en las redes sociales no tarda en aparecer, en forma de canción: "Will Grigg's on fire".
El sábado, como dice la melodía original, Grigg volvió a estar en llamas. Con sus tres tantos lideró al Wigan a una espectacular goleada 7-0 sobre el Oxford United que consolidó a su equipo en la cima de la tercera categoría de Inglaterra. Y claro, la famosa canción volvió a oírse en la cancha y a reproducirse en las diferentes plataformas.
Grigg es un centrodelantero norirlandés de 26 años que se hizo mundialmente famoso en la Eurocopa de 2016, incluso sin necesidad de pisar el campo. En los cuatro partidos que jugó Irlanda del Norte antes de quedar eliminada ante Gales en los octavos de final, el atacante no jugó ni un minuto, pese a que los hinchas lo pedían desde las gradas y en los bares franceses.
"La canción es una cosa", dijo más tarde con frustración. "Pero ir a un torneo como un futbolista profesional y luego no jugar es totalmente decepcionante".
La cuestión había nacido tiempo antes, en mayo de 2016, cuando Sean Kennedy, un hincha del Wigan, subió un video a Youtube bajo el título "Will Grigg's on fire" (Will Grigg está en llamas). Allí, Kennedy celebraba las bondades goleadoras de su ídolo con una letra de su autoría sobre con la música del tema "Freed from Desire", de la italiana Gala Rizzatto. El video tuvo más de 3,7 millones de reproducciones.
El cantito fue adoptado por la hinchada del Wigan y luego por los aficionados norirlandeses, que lo transformaron en un himno -y un fenómeno viral en todo el mundo- durante la Eurocopa de Francia. Incluso, el dúo pop británico Blonde grabó la canción de forma profesional y fue un éxito en ventas.
Sin embargo, el goleador no quiere quedarse sólo como un fenómeno en de las redes y, a veces, lo consigue. En la temporada 2015/2016, en su primera campaña en el Wigan, anotó 25 goles y comandó al club al ascenso a la segunda división. No pudo mantener el nivel en esa categoría y, aquejado por una lesión en la rodilla, sólo anotó cinco tantos en la campaña que devolvió al club a tercera.
De agosto a noviembre, su poder de fuego también estuvo ausente, con apenas tres goles en la "Liga One". No obstante, en el último mes, Grigg volvió a estar en llamas, con siete goles en seis partidos.
Hace dos semanas, en la repetición del duelo de segunda ronda de la Copa inglesa ante el modesto Fylde, de la quinta división, tras un empate 1-1 con un gol suyo, el norirlandés volvió a agigantar su leyenda.
Con el partido 2-1 para el Fylde, el entrenador Paul Cook lo mandó al campo cuando iban 61 minutos para evitar el desastre. Y con un doblete a los 80' y 84', Grigg dio vuelta el partido para que en el DW Stadium se reeditara bien fuerte el viejo hit: "Will Grigg's on fire, your defence is terriefied" (Will Grigg está en llamas, tu defensa está aterrorizada).
"Lo estuve planeado durante mucho tiempo", bromeó el delantero después del juego. "Pensé en saltar al campo y anotar dos veces justo antes del final", añadió. Hubo momentos en que Grigg realmente parecía anotar a voluntad, casi como si lo hubiera planeado cuidadosamente. El último mes volvió a mostrarlo y ahora espera continuarlo en el tiempo, para regresar a la selección.
Después de hacerse famoso sin jugar, Grigg casi no vistió más la camiseta norirlandesa. No lo hace desde el 4-0 sobre Azerbaiyán en las eliminatorias para el Mundial de Rusia 2018, en noviembre de 2016. Si continúa en racha y el Wigan sigue ganando gracias a sus goles, es posible una nueva convocatoria. Y claro, su canción volverá a sonar bien fuerte en todas las canchas.