Deseo hacer algunas reflexiones sobre el uso de WhatsApp. Sin duda es un gran adelanto tecnológico de las comunicaciones, con todos los beneficios que ello trae. Pero a todo buen uso se contrapone otro no adecuado, y paso a detallar algunos de ellos.
Existen muchos casos de grupos que se han disuelto debido a que alguien envió mensajes inconvenientes, ya sea para degradar a personas, o enviando temas desagradables, mezclando lo político, religioso, morboso, obsceno, pornográfico, etc.
En otros casos se trató de mensajes con doble intencionalidad, sin querer ofender pero en los que indirectamente se agregan palabras con un propósito determinado, palabras que no se atreven a escribir pero llevan a pensar.
También existen “whatsappeadores” bien intencionados que re-envían mensajes pidiendo ayuda por algo o por alguien que en el fondo es puro amor y caridad, pero sin destino apropiado, o sea sin verificar si dicha ayuda llega efectivamente a alguien, y se re-envían en forma automática a todos los contactos provocando un sinnúmero de nuevos mensajes encadenados que se hacen infinitos. Existen los que no se detienen en pensar y envían mensajes de posibles virus, de cobros por utilizar WhatsApp, pasajes gratis, o catástrofes, eclipses de otros hemisferios, etc., etc., u oraciones, rezos y cadenas que entiendo no es el lugar adecuado para hacerlo.
También hay los que re-envían citas de personas famosos, el Papa, Martin Luther King, Mandela, Favaloro, o citas de escritores -Borges, García Márquez, García Lorca, etc.-, que no se corresponden al estilo de los mensajes o los escritos de dichas personas.
Y por último, aquellos que envían whatsapps cambiando hora o lugar de encuentros o respuestas importantes por esta vía, sin pensar que el destinatario no está pegado al celular y al no recibirlo a tiempo provoca desencuentros y desinteligencias importantes, a veces graves; el emisor se excusa diciendo "te mandé un whatsapp". Estimo, entonces, que debemos detenernos a pensar, meditar profundamente los beneficios o no de enviar todo este tipo de mensajes que nos llegan a nuestro celular. Que más que un medio para comunicar a las personas se ha convertido en un entretenimiento nada positivo, en los casos descriptos. Seamos conscientes de que este medio se ha inventado para mejorar las relaciones humanas, sus comunicaciones, su intelecto y su preocupación por ser mejores. Caso contrario es un juguete barato en manos de todos.
José Carrasco
DNI 6.887.267