La peor tragedia vial en la historia de Mendoza dejó 19 muertos, 22 heridos y un profundo dolor en cientos de personas que hoy lloran a sus seres queridos o ruegan por su pronta recuperación.
Tras horas de gran incertidumbre, recién el sábado a la tarde los familiares comenzaron a identificar a las víctimas fatales del vuelco del colectivo de la empresa TurBus, lo que les permitió iniciar los trámites para darles el último adiós.
Alicia Costa (48) y su hija Cinthia Costa (30) son parte de la lista de fallecidos, junto al bebé de 11 meses de la segunda, Valentín Voci Costa. Las mujeres fueron veladas hasta ayer a las 18 en las salas Pellegrini ante una multitud de amigos, familiares y compañeros de militancia de ambas.
En un ambiente de gran respeto y tristeza, los asistentes intentaron mantener la fortaleza, sobre todo para resguardar a los menores presentes. Además de la joven mamá, Alicia tenía otros dos hijos de 12 y 5 años. Por su parte, Cinthia era madre de tres niños, ya que además de Valentín tenía dos nenas.
Ambas emprendieron el viaje hacia el país vecino para comprarles útiles escolares a sus pequeños, como muchos otros mendocinos que viajaban en ese colectivo. Alicia era secretaria femenina del PJ de Godoy Cruz y una gran referente social en el oeste de ese departamento. Sus compañeros de militancia peronista la describieron como una luchadora y una trabajadora incansable por el derecho a la educación y a la nutrición de los niños.
Para su familia era una mujer solidaria, alegre y defensora del medio ambiente. “Como le gustaba la jardinería, para el día de las madres hacía plantines y los repartía entre sus vecinos del barrio Suárez”, recordaron con cariño. Tenía dos hermanas y desde hace algunos meses su marido está internado luego de sufrir un ACV. A pesar de todo, ella no perdía las fuerzas para salir adelante, según comentaron.
Su hija Cinthia trabajaba en un Centro de Documentación Rápida (CDR) y militaba en el mismo partido junto a su mamá y a su esposo. Con ellos compartía su lucha por un mundo mejor. Sus amigas presentes la describieron como una “madraza” y una luz para sus hijos.
A su bebé Valentín le decían cariñosamente “el japonecito”, por sus cachetes y sus simpáticos ojitos. A diferencia de su mamá y de su abuela, el bebé fue cremado en compañía de sus seres queridos.
La pareja de enfermeros
La tragedia en la ruta a Chile también enlutó a los familiares de una pareja de enfermeros compuesta por José Luis Heber Sacaba (61) y Norma Beatriz Amador (51), quienes vivían en la ciudad de San Martín.
Luis trabajaba desde hace varios años en el hospital Del Carmen como encargado nocturno del servicio de enfermería, mientras que su esposa Norma prestaba servicio en el hospital de día del Central. Eran padres de cuatro hijos: una mujer y tres varones.
Los restos de la pareja fueron inhumados ayer en el cementerio Parque La Paz de los Olivos, de Junín. El fallecimiento del hombre también repercutió en Luján de Cuyo, ya que era sobrino de un recordado arquero de Luján Sport Club, Ramón Alberto Sacaba, de 84 años.
San Juan está de luto
Gran repercusión ha tenido el fatídico vuelco en San Juan, ya que tres de las víctimas eran oriundas de esa provincia. Anoche todavía se esperaba la llegada de los cuerpos para comenzar con los el velatorio conjunto.
Eliana Oros (27), quien cursaba su segundo mes de embarazo, fue una de las que perdió la vida en el siniestro. Ella había emprendido el viaje junto a su esposo Jorge Maldonado y su pequeño hijo Juan Cruz, quienes resultaron heridos y fueron internados. El niño aún permanece internado en el Notti.
En tanto, la pareja conformada por Víctor Olivera (35) y María Fernanda Sánchez (24) también perdió la vida dejando huérfanos a sus dos hijos, Thiago y Dylan, que viajaban con ellos y fueron trasladados al Notti, donde se encuentran fuera de peligro.
