Un inicio temprano de la vida sexual, el poseer múltiples parejas sexuales, la ausencia o el cuidado irresponsable de la salud sexual y el cigarrillo son los principales transmisores y agravantes de la enfermedad según precisa la Ginecóloga mendocina de reconocimiento internacional, Dra. Gioconda Lo Castro.
Existen dos serotipos, los considerados de alto riesgo y los de bajo riesgo, dentro de los serotipos de mayor riesgo (16, 18, 31, 33, 35, 39, 45, 51, 52, 56, 58, 59, 68, 73 y 82) se encuentran un tipo de proteínas llamadas oncoproteínas (E6 y E7) que afectan las funciones de división, diferenciación y proliferación de células, así como también su muerte programada, entre otras.