El pollo volvió a aumentar esta semana y los consumidores se sorprendieron con un aumento que ronda el 15%. A principios de mes se registró un aumento de entre el 10% y el 12%, y con este nuevo incremento, el kilo de pollo fresco se ubica en los $60.
"Sube la luz, sube el combustible y con eso los fletes, es lógico que todo eso impacte en el producto. Hubo dos o tres aumentos anteriores que fuimos absorbiendo para no aumentar los precios, pero con los nuevos incrementos es lógico que los precios suban", explicó el empresario de la carne José "Pepe" Michelli después del primer incremento.
Y después de los últimos incrementos en el combustible, el precio volvió a elevarse. Actualmente, el kilo de supremas supera los $110.
En tanto que la carne aun no ha registrado aumentos significativos, aunque a principios de mes se pagó $2 más por kilo en Buenos Aires.